Barrett asume como jueza de la Corte Suprema; se fortalece por décadas la mayoría conservadora

Amy Coney Barrett, magistrada en la Corte Suprema de Estados Unidos, en su juramentación el 26 de octubre de 2020.

El Senado de Estados Unidos confirmó este lunes en la noche, a ocho días de las elecciones presidenciales, a Amy Coney Barrett como nueva jueza del Tribunal Supremo, consolidando así la mayoría conservadora en la corte más importante del país.

Barrett fue confirmada con 52 votos en favor -todos de senadores republicanos- y 48 en contra -todos los demócratas y la conservadora Susan Collins.

Barrett, de 48 años, juró su cargo vitalicio esta misma noche en un acto en la Casa Blanca en el que también participó el presidente Donald Trump.

La confirmación de Barrett llega tras un apresurado y polémico proceso que se inició el 18 de septiembre pasado con la muerte de la jueza progresista Ruth Bader Ginsburg a los 87 años.

Barrett fue nominada por Trump días después, el 26 de septiembre, antes de que Ginsburg fuese incluso sepultada.

Los republicanos aprovecharon así su control sobre el Ejecutivo y sobre el Senado para decantar aun más a su favor el Supremo, que ahora queda con seis magistrados conservadores y tres progresistas, lo que marca el futuro de la corte para las próximas décadas.

El presidente Trump en la ceremonia de juramentación

Trump, de hecho, ha logrado confirmar a tres jueces para el Supremo en sus cuatro años en el poder: Neil Gorsuch, Brett Kavanaugh y Barrett.

Los conservadores consideran además que la confirmación de Barrett como una "victoria histórica" para quienes se oponen aborto.

El senador cubanoamericano Marco Rubio ha dicho que a partir de ahora, "la izquierda radical" no podrá usar el Tribunal Supremo para legislar. El tribunal será solo para juzgar, y no para cambiar la voluntad de la Legislatura, explicó Rubio en un comunicado de prensa.

El congresista Mario Díaz-Balart, también de origen cubano, aplaudió la decisión tomada por el Senado de Estados Unidos:

"La jueza Amy Coney Barrett ha demostrado ser una férrea defensora del Estado de derecho que respeta diligentemente la Constitución. Su confirmación es un paso histórico hacia una mayor salvaguarda de los principios fundamentales de nuestra democracia".

El senador Ted Cruz de Texas, y de familia cubana, dijo que la mayoría republicana en el Senado "cumplió con su promesa de seleccionar a jueces conservadores que respetan la Constitución" y las ideas de los autores de dicho documento.