Amnistía Internacional comenta en su página digital que el pasado fin de semana el Gobierno cubano marcó un hito histórico en Panamá al unirse a los líderes de toda la región en la Cumbre de las Américas. "Para entender el significado de este momento", dice AI, "es importante mirar hacia atrás y hacer balance de los avances de Cuba y la región que en su conjunto han hecho".
En aquel momento de 1962, en medio de las tensiones de la Guerra Fría, la OEA expresó sin rodeos su justificación de una decisión tan drástica: "El actual Gobierno de Cuba oficialmente se ha declarado marxista-leninista, un sistema incompatible con los principios y objetivos del sistema americano".
El artículo de AI se pregunta qué ha cambiado en Cuba a lo largo de todos estos años y cita los arrestos a opositores como constante del Gobierno de la isla. "En la Cuba de hoy, sigue siendo prácticamente imposible que alguien pueda expresar pacíficamente ideas contrarias al Gobierno cubano".
AI señala que el mes pasado, cuando la Comisión Interamericana celebró una audiencia sobre los Derechos Humanos en Cuba, "los asientos reservados para la delegación del Gobierno cubano permanecieron vacíos, al igual que en las audiencias anteriores".
"Para que un país pueda defender su historial de Derechos Humanos, debe ser responsable ante el sistema interamericano. Una buena manera de empezar a mostrarlo sería que Cuba libere a los presos de conciencia que aún permanecen encarcelados. Ha llegado el tiempo en que todas las opiniones puedan ser expresadas pacíficamente en la isla", concluye el artículo de AI.