A más de un año de su llegada a Alemania junto con sus dos hijos menores, la activista cubana Daniela Rojo recibió la noticia este jueves de la aprobación de su caso de asilo político en ese Estado europeo.
“He estado esperando muchísimo. Un año he estado esperando por la respuesta. Para mí significa el mundo porque finalmente puedo salir del refugio, puedo trabajar, puedo ir a un curso de integración, o sea, finalmente podemos llevar mis hijos y yo una vida normal en este país”, declaró a Martí Noticias.
Rojo, de 27 años, arribó a la ciudad de Frankfurt el 15 de mayo de 2022, junto a sus dos niños pequeños, luego de pasar varios meses bajo acoso de la Seguridad del Estado en Cuba, debido a su activismo en defensa de los derechos humanos y en contra del régimen de Miguel Díaz-Canel.
Además, contó que en este año ha sufrido depresión por estar en el refugio, “no porque tenga malas condiciones sino por no poder hacer todo lo que puede hacer la gente en este país”. Ahora, con la aprobación de su caso, ya puede acceder al permiso de trabajo y asistir a un curso de integración para migrantes.
En Cuba, la joven activista fue una de las más de 1850 personas detenidas por su participación en las protestas antigubernamentales de julio de 2021 en decenas de pueblos y ciudades de Cuba. En ese momento fue acusada de desorden público y pasó varias semanas en prisión, hasta el 3 de agosto, que fue excarcelada con una fianza de 2,000 pesos cubanos.
Sin embargo, tras salir de la cárcel, Rojo continuó defendiendo sus ideas y fue una de las fundadoras de la plataforma Archipiélago, que convocó a una manifestación nacional el 15 de noviembre de 2021, por la liberación de los presos políticos, la paz y cambios en el sistema.
Como consecuencia de su labor, en distintos momentos sufrió nuevas detenciones, interrogatorios y amenazas por parte de oficiales de la Policía Nacional Revolucionaria y la Seguridad del Estado.
Días antes de salir al exilio, a comienzos de mayo, fue arrestada por varias horas, cuando se disponía a recoger a sus hijos en la escuela, y denunció que había sido una vez más amenazada con la cárcel.
Lee también Piden cinco años de prisión para la ex coordinadora de Archipiélago Daniela RojoRojo explicó que en Alemania ha tenido muchísimos retos, como el idioma, la adaptación a una cultura diferente, el clima, el choque de llegar a Europa, y que incluso ha pensado en pedir que la regresen a Cuba en momentos de mucha tristeza. “Pero entiendo que por mis hijos lo que me toca es luchar aquí y seguir para adelante en este país”.
Además, desde la distancia ha continuado haciendo activismo por los derechos humanos en Cuba y la liberación de los presos políticos, tanto en redes sociales como en espacios públicos en los que se han realizado manifestaciones.
“Quizás me tome una semana de vacaciones, pero cuando una ha sufrido en persona la represión, una no puede simplemente tomarse la Coca Cola del olvido, como dice la gente. Una sabe y una tiene conciencia de lo que está pasando esa gente allá y una no puede simplemente virar la espalda, si tienes un mínimo de conciencia y corazón”, agregó.
No obstante, espera poder regresar en algún momento a Cuba, donde todavía residen su madre, una hermana y algunos primos, siempre que sea a una “Cuba en libertad”. Contó que le gustaría entonces reunirse con amigos y “ayudar en la construcción de ese país nuevo y democrático que queremos todos”.
“Me veo ocupada todo el tiempo en una Cuba libre porque no voy a parar de hacer cosas”, dijo.