El gobernante cubano Miguel Díaz-Canel manifestó su propósito de ampliar los vínculos económicos, comerciales y financieros del régimen con Rusia a la altura de los nexos políticos, durante el recibimiento este martes del asesor de Vladimir Putin, Maksim Oreshkin.
La visita, la más reciente en el desfile de los últimos meses de funcionarios rusos a la Isla, muestra “un alto nivel de coincidencia en muchos puntos de la agenda internacional”, expresó el Díaz-Canel.
“Estas visitas están enviando el mensaje de seguridad mutua entre dos estados similares, oligárquicos, pero con una relación asimétrica, en la que el gobierno ruso, mucho más fuerte y poderoso, da la seguridad de que va a tratar de reflotar la economía cubana y el gobierno cubano tiene un interés claro en renegociar la deuda con Rusia”, indicó desde La Habana el analista y activista político Manuel Cuesta Morúa.
La deuda externa total de Cuba se calcula en más de 18.500 millones de dólares, una parte a Rusia. La Duma (Cámara Baja de la Asamblea Federal de Rusia) ratificó un proyecto de reestructuración de la deuda de Cuba de 2.300 millones de dólares.
“Pero el mensaje de Rusia que, por supuesto, también tiene sus dificultades económicas, no ha sido lo suficientemente claro en esa dirección”, subrayó el opositor.
La Habana y Moscú se apoyan mutuamente en foros y escenarios internacionales como Naciones Unidas, donde el régimen ha apuntalado a su aliado en la invasión a Ucrania.
A Rusia le interesa “confirmar la seguridad de que Cuba va a cerrar ya, definitivamente, ese ciclo de conversión de la política exterior cubana y del Estado cubano en vasalla de la política exterior rusa”, afirmó el experto.
“En política exterior, a partir de los propios preceptos políticos, los preceptos históricos, Cuba es una nación, que se supone que lucha por la integridad territorial, la soberanía de las naciones, cosa que no está haciendo, aquí hay una perdida totalmente de autonomía frente a Rusia, incluso respecto de sus propios preceptos constitucionales, que establecen que la nación está contra toda política expansionista, venga de donde venga”, recalcó Cuesta Morúa.
Lee también Presidente de la Duma vuelve a Cuba con una extensa delegación“Pero Rusia necesita esa seguridad. El gobierno cubano se la da, alegre y contento, y esta actitud viene a ser confirmada ahora con estas visitas, porque Rusia necesita seguir rompiendo su aislamiento (...). Para eso necesita garantizar estos estados vasallos: Cuba, Nicaragua, de alguna manera Venezuela. Acá, en el hemisferio occidental, Cuba frente a frente a los Estados Unidos”, señaló el especialista.
“Un ciclo terrible para nosotros, los cubanos, que debemos ponernos alerta porque no suponíamos que, después de la caída de la Unión Soviética, Cuba volvería a convertirse en una avanzadilla de la política exterior de otra nación, y ahora, prácticamente, un estado vasallo de Rusia”, subrayó.
En su reunión con el nuevo visitante, Díaz-Canel agradeció el apoyo proporcionado por la Federación Rusa “en la lucha contra el bloqueo”.
Por su parte, Oreshkin se refirió a las principales líneas que se han propuesto fortalecer en Cuba: la energía, el flujo turístico y una “bastante difícil” que es la de las inversiones de compañías y empresas rusas en la economía cubana.
Junto al asesor económico de Putin viajaron directivos de empresas que están dispuestas a invertir en sectores de la “economía cubana como minería, agricultura, turismo, infraestructura y energía".
“Se han producido una serie de beneficios desde Rusia hacia Cuba, como el aumento de la inversión, el comercio, las importaciones de petróleo, Rusia pospuso el pago de la deuda cubana hasta 2027. Numerosas empresas e industrias en Cuba se están o se van a beneficiar de inversiones rusas”, explicó Librado Linares, coordinador del Movimiento Cubano Reflexión.
Pero para el líder opositor, Rusia está en un momento muy débil, de soledad “extraordinaria” a nivel mundial y está comprando la lealtad de Cuba y su “eventual participación en una imprevista tercera Guerra Mundial”.
En marzo, el secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, Nikolái Pátrushev, exagente de la KGB, viajó a Cuba para “mantener consultas bilaterales interinstitucionales”, según un reporte de la agencia estatal Sputnik.
“Una potencia de corte autoritario, nacionalista, expansionista como Rusia, no da nada gratis. El general jefe del Ministerio del interior ha estado presente en las conversaciones y obviamente siempre su presencia está relacionada con los ámbitos militares y la colaboración en lo militar”, precisó Linares.
“Yo quisiera llamar la atención sobre esto porque creo que sería muy lamentable que Cuba se fuera a involucrar militarmente con esta potencia invasora”, alertó.
El viaje de Oreshkin a la capital cubana ocurre unos días después de las visitas del presidente de la Duma Estatal, Vyacheslav Volodin, el 29 de abril, y del canciller Serguéi Lavrov el día 20.