El presidente Donald Trump anunció el miércoles que Estados Unidos reconoce ahora a Jerusalén como la capital de Israel, una medida que trastoca décadas de política exterior estadounidense.
En un discurso en la Casa Blanca, Trump dijo que ha “resuelto que es hora de reconocer oficialmente a Jerusalén como la capital de Israel” y que la medida beneficia los intereses de Estados Unidos”.
Trump aseguró que su decisión no debe interpretarse como una falta de compromiso con el proceso de paz entre israelíes y palestinos, y prometió que hará "todo" lo posible para ayudar a las partes a lograrlo.
"Estados Unidos apoyará una solución de dos Estados si eso es lo que acuerdan las dos partes", dijo Trump en un discurso desde la sala de recepciones diplomáticas de la Casa Blanca.
Trump ordenó hoy al Departamento de Estado comenzar el proceso para trasladar a Jerusalén la embajada estadounidense en Israel, que ahora está en Tel Aviv, un proceso que llevará al menos tres años porque hay que
construir el edificio, según la Casa Blanca.
El Presidente instruyó a su Gobierno a "contratar arquitectos" para construir una nueva embajada en Jerusalén que será "un tributo magnífico a la paz".
El presidente de Israel, Reuvén Rivlin, felicitó a su homólogo estadounidense tras el anuncio, y dijo que dará instrucciones para trasladar a la ciudad la embajada norteamericana.
"Felicito al presidente Donald Trump por su anuncio (...). No hay un regalo más hermoso ni adecuado, cuando nos acercamos a los 70 años de la independencia del Estado de Israel", señaló Rivlin en un comunicado.
Añadió que la decisión de la Casa Blanca "es un logro en el reconocimiento del derecho del pueblo judío a nuestra tierra y un hito en nuestro camino para la paz".
El primer ministro Benjamin Netanyahu elogió como un “hito histórico” la decisión de Trump.
Netanyahu, en un mensaje de video pregrabado, dijo que cualquier acuerdo de paz con los palestinos debe incluir a Jerusalén como la capital de Israel e instó a otros países a seguir el ejemplo de Estados Unidos y trasladar sus embajadas a la ciudad.
Los tres congresistas cubanoamericanos de la Florida, todos miembros del Partido Republicano, emitieron declaraciones apoyando la decisión del presidente Trump.
“La decisión de hoy no impide nuestro objetivo compartido de dos Estados para dos pueblos a ser negociado entre las partes”, afirmó la congresista Ileana Ros-Lehtinen.
Por su parte, el congresista, Mario Díaz- Balart declaró que aunque “muchos pueden estar molestos con la decisión, o incluso utilizan esto como excusa para incitar a la violencia, hay que recordar que Jerusalén es la capital del país verdadero. Felicito a la Administración de su decidida apuesta por nuestros aliados".
"Jerusalén es sin duda la capital de Israel y felicito la decisión del Presidente de reconocerla como tal. Negar verdades tan simples y obvias no es una estrategia para la paz”, afirmó en su declaración el congresista Carlos Curbelo.
(Con información de AP y EFE)
