Sin petición fiscal y todavía en prisión se encuentran cuatro de los manifestantes de la protesta popular que tuvo lugar en Caimanera, Guantánamo, el pasado 6 de mayo, cuando cientos de personas salieron a las calles para demandar libertad y mejores condiciones de vida.
Luis Miguel Alarcón Martínez, los hermanos Rody y Daniel Álvarez González, y Freddy Sarquiz están acusados por el delito de desórdenes públicos, sumado al cargo de resistencia que pesa en contra de Luis Miguel; daños a la propiedad, en el caso de Daniel, y atentado, sobre Rody, dijo a Martí Noticias Victoria Martínez Valdivia, madre de Luis Miguel.
La señora atestiguó que los cuatro enfrentan precarias condiciones en la prisión provincial Combinado de Guantánamo.
"Las condiciones en el Combinado son pésimamente malísimas, un brote de chinches, caminan por las camas, por las sábanas, aquello es terrible. Los presos está haciendo alergia de los alimentos mal elaborados, de un picadillo que le dieron, están con diarreas. De los medicamentos se mantiene igual, no le dejan pasar medicamentos", relató.
La mujer dijo que su hijo casi no puede comer por un absceso dental que sufre, que ya le provocó la pérdida de un diente y está a punto de perder un segundo, esto tras la golpiza recibida el día del arresto. Además indicó que no está recibiendo atención médica.
"La silla (dental) de allí de la prisión está rota y no lo han llevado al hospital para revisarle la boca, el muchacho apenas come, no duerme bien porque los dolores se lo comen", afirmó la fuente.
El lunes 26 de junio la Fiscalía Militar de Guantánamo tomó declaración escrita a familiares y detenidos durante la protesta, que denunciaron haber sido golpeados por los miembros de la Brigada Especial de Boinas Negras.
La denuncia fue firmada por Luis Miguel, Rody y Daniel así como por Felipe Octavio Correa Martínez y Yandris Pelier Matos, ambos en libertad bajo fianza desde el 31 de mayo y aún bajo investigación. También hay declaraciones del personal médico que los atendió en el Hospital Provincial Agostinho Neto, a donde fueron llevados por el instructor penal luego de la violenta detención y el testimonio de Victoria Martínez Valdivia.
Sobre la situación legal que enfrentan los cuatro detenidos en prisión, la señora explicó que se encuentran en un limbo jurídico y que la defensa intentará nuevamente solicitar un cambio de medida cautelar para que puedan permanecer bajo fianza en prisión domiciliaria hasta el día del juicio. Una petición similar ya fue rechazada por la fiscalía.
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