La dama de blanco Leticia Ramos Herrería denunció este lunes a Radio Martí que vive una situación desesperante y de total represión desde hace más de dos meses. Su padre es enfermo terminal de cáncer y en algunas ocasiones la Seguridad del Estado le ha impedido recoger los balones de oxígeno para sostener la vida del anciano.
“Tengo a mi papá con cáncer de próstata, con metástasis peritoneal, está grave, de hecho lo mandaron para la casa hasta que fallezca”, explicó la activista, residente en el municipio de Cárdenas, provincia de Matanzas.
Ramos Herrería dijo que una situación similar –aunque no a tales extremos- había ocurrido en 2016 al regresar de una visita a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
“Esto es una fuerte represión y medida que están tomando contra mí, debido a las denuncias que le he hecho al régimen de los Castro por todo lo que está haciendo, no solo contra los opositores y damas de blanco, sino contra el pueblo mismo de Cuba”, insistió la activista.
La activista aseveró que el peso de sus denuncias puede haber determinado un acoso de tal magnitud por parte de las fuerzas represivas.
En abril pasado la opositora se reunió en Washington con integrantes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y funcionarios del Departamento del Estado. En el mismo recorrido, pero en California, Herrería sostuvo intercambios con un relator especial de la ONU sobre la situación de los derechos humanos en la isla.
“Son denuncias que he llevado fotografiadas, en video y con nombres y apellidos de altos oficiales de la Seguridad del Estado cometiendo actos violentos contra opositores y damas de blanco”, indicó la mujer.
Las damas de blanco son detenidas invariablemente desde hace un centenar de domingos en sus sedes de La Habana, Matanzas, Villa Clara y Santiago de Cuba.
Ramos detalló que el chequeo personal de la policía política se ha extendido a su familia, amigos, vecinos, choferes de alquiler de autos y opositores que se han solidarizado con su caso.
En las pocas ocasiones en que le han permitido salir de su vivienda a buscar alimentos, comprar una cisterna con agua o cambiar los tanques de oxígeno, los oficiales la siguen paso a paso, indicó. “Soy perseguida por dos oficiales en una moto Suzuki. Entran hasta el mismo hospital, suben a la dirección donde tengo que entregar el papel para que me den el balón de oxígeno, van hasta el lugar donde está el personal que me lo entrega; si voy a ver a un médico, van detrás de mí”.
Este domingo, Leticia tuvo que dejar que un carretonero fuera a buscar el taque de oxígeno para su padre, pues como coincidía con una actividad por el Día de los niños en Cuba, la policía volvió a ponerse en medio.
La represión contra su familia es similar. “Estos familiares míos tienen que alquilar carros para poder llegar a mi casa y ya no dejan que alquilen los carros, amenazan a los choferes”, aseguró.
Los opositores Nelson Acosta y Annia Zamora fueron detenidos antes de llegar a la casa sitiada. Al primero lo desnudaron, relató Ramos Herrería. “Son detenidos y llevados a unidades de policía, requisado totalmente su cuerpo y los han obligado a desnudarse”.
El pasado 28 de junio Ramos Herrería se disponía salir de la localidad, pero fue llevada a la unidad policial por un oficial que se presenta como “Manuel”, allí donde recibió una golpiza que oportunamente denunció.
El castigo corrió, asegura Leticia, por parte de la oficial Yuli, la misma que le han destinado para tales humillaciones. Le impuso una multa de sesenta pesos por un supuesto “desorden público”, lo que fue discutido por la activista.
“Me da una entrada a golpes, porque dice que me tengo que callar la boca. Todavía tengo las rodillascon moretones porque me lanzó al piso, me arrancó bastantes cabellos, me dio golpes en toda la espalda. … me gritó que me iba a matar: ‘Yo soy la que te va a matar a ti, Leticia, la lengua te la voy a sacar’, fueron las frases que la oficial Yuli usó dentro de la unidad de la policía”, contó la opositora.
Otra de las intromisiones en la vida privada de la Dama de Blanco Leticia Ramos es la suspensión temporal del servicio de correo electrónico y su teléfono móvil, denunció.
"Temo por mi vida, porque yo tengo una moto eléctrica y salgo en ella, y se e pegan los carros de patrulla detrás, el cerco es bastante grave. No descarto un accidente, provocado por ellos mismos", concluyó.