En la misma época de la campaña de alfabetización elogiada por el senador Bernie Sanders había ya en Cuba más de 100,000 prisioneros políticos, escribieron en una carta abierta al presidente del Comité Nacional Demócrata seis cubanos que cumplieron entre 17 y 23 años de cárcel en la isla por oponerse al régimen de Fidel Castro.
Casi simultáneamente, dos votantes demócratas presentaron en una corte del norte de la Florida una demanda civil que pide descalificar a Sanders como precandidato de ese partido a la Casa Blanca, al considerar que el senador de Vermont es “claramente independiente y claramente no es demócrata”.
"Como ex presos políticos que cumplimos muchos años en las cárceles de Fidel Castro sufriendo torturas, palizas, años de confinamiento solitario y tratos inhumanos, nos ofende que un candidato presidencial de su partido se haya atrevido a elogiar a un tirano que derramó tanta sangre de cubanos inocentes, privó a todos de sus derechos básicos, dividió a la mayoría de las familias, confiscó todas las propiedades y negocios, obligó a exiliarse a más del 10% de la población y empobreció al país a niveles de subsistencia", dice la carta, remitida el lunes a Tom Pérez, presidente del Comité Nacional Demócrata.
La suscriben Ernesto Díaz, quien pasó 23 años en el presidio político en Cuba; Ángel de Fana y Basilio Guzmán (22 años cada uno); Luis Zúñiga (19 años); Roberto Pizano (18 años), y Jorge Luis García Pérez “Antúnez” (17 años). Al argumento de Sanders de que los cubanos no se rebelaron contra Castro por sus virtudes como gobernante, los ex prisioneros políticos oponen evidencias concretas de lo ocurrido a quienes se rebelaban.
“En los primeros 24 meses [de su ‘revolución’], Castro ejecutó a más de dos mil personas”, dicen. “Poco después comenzó a fusilar a la mayoría de sus antiguos camaradas revolucionarios que rechazaron la dictadura socialista. En 1962, apenas tres años después de que Castro llegara al poder, había rebeldes que luchaban contra su tiranía en casi todas las montañas del país”.
Al cabo de 61 años de socialismo, el ingreso promedio en Cuba es de 20 dólares al mes, muy por debajo del dólar por día que establece el Banco Mundial como nivel mínimo de subsistencia, declaran los firmantes.
De acuerdo con los ex prisioneros políticos, que califican al socialismo como “el peor sistema político por el que puede pasar un país”, el senador Sanders miente o ignora los acontecimientos en Cuba. Acompañan su impugnación con datos concretos sobre la economía del país cuando Fidel Castro llegó al poder, en contraste con su estado actual.
“Cuba era el primer exportador mundial de azúcar; el segundo mayor exportador de tabaco; el quinto mayor exportador de níquel y cobalto, y se autoabastecía de productos agrícolas y de carne”, escriben los firmantes. “Cuba exportó zapatos a Italia y carne de res al Reino Unido. Cuba tenía el tercer ingreso per cápita más alto de América Latina y el número 40 en el mundo. En cambio, Cuba tiene que importar hoy el 82% de los alimentos que consume”.
Considerando que en uno de sus elogios a Castro Sanders invoca la campaña de alfabetización, los ex prisioneros políticos hacen también un recuento del sistema educacional cubano a finales de la década de los 50.
“Cuba tenía 12 universidades y el 87% de su población alfabetizada”, apuntan los firmantes de la carta. “Cuba no necesitaba el ‘programa de alfabetización’ de Castro. Lo que hizo el tirano, de hecho, fue un ‘programa de adoctrinamiento político’ para engañar a campesinos inocentes. Incluso hoy, si usted ve un cuaderno de lectura de educación primaria comprobará que el adoctrinamiento es el núcleo del sistema educativo impuesto por el régimen de Castro”.
Se preguntan además si el señor Sanders sabe que los relatores especiales de Naciones Unidas han enviado cartas a La Habana para quejarse de que los médicos cubanos enviados a trabajar en otros países se han convertido en esclavos modernos, pues el gobierno se queda con una parte sustancial de sus salarios, les retiran sus pasaportes y los mantienen bajo vigilancia para evitar deserciones.
La carta abierta fue publicada origintalmente en Breibart News.
La demanda civil fue presentada en una corte de circuito del Condado de León, en el norte de la Florida, por los veteranos de guerra Frank Bach y George Brown. Piden que en las primarias del estado, previstas para el 17 de marzo, el Partido Demócrata no cuente los votos que gane Sanders.
Según los demandantes, los electores demócratas tienen derecho a sufragar sus votos solo para aspirantes del mismo partido, no a favor de un independiente, y por lo tanto solicitan “la protección de este tribunal de su derecho a votar por un demócrata”, reporta la agencia EFE.
La abogada de Bach y Brown declaró que sus clientes se preocupan por considerar que Sanders está demasiado a la izquierda para ganar una elección general y vencer al presidente Donald Trump, añade EFE.
