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Policía golpea a Dama de Blanco en la cabeza, las manos y el rostro


Tamara Rodríguez Quesada.
Tamara Rodríguez Quesada.

En el hospital le suturaron la herida del codo, pero no atendieron el dolor en un dedo de la mano derecha, a pesar de que el ortopédico aseguró que se trataba de una fractura.

Agentes de la policía de La Habana golpearon a la Dama de Blanco Tamara Rodríguez Quesada en la cabeza, el rostro y un dedo, al arrestarla por participar en la acostumbrada marcha dominical de su organización por 5ta. Avenida.

"Hoy estoy toda apabullada, pero con mucha firmeza", dijo Rodríguez Quesada en entrevista en el programa Cuba al Día de Radio Martí y contó en detalle la agresión policial.

"Cuando pretendía subirme a la guagua, tres policías se abalanzaban sobre mí. Y, desde ese momento, una de ellas me aprisionó todo el tórax hacia los pies. Otra me viró las manos hacia atrás y ahí me esposó con tanta fuerza que ya yo hoy no me siento los brazos", contó de los primeros momentos de la agresión.

Los policías le mantuvieron en esa posición desde su detención en la calle 3ra. hasta la Escuela de Policías de Tarará.

"Ahí, cuando ya me fueron a levantar mis piernas no me respondían. Cuando me trataban de sacar con violencia del asiento ya yo perdí el conocimiento y me desmayé", contó.

Rodríguez Quesada recobró el conocimiento cuando sintió un fuerte golpe en la cabeza. En ese momento no se percató de qué había sucedido, pero otras activistas testigos del hecho le contaron más tarde que el oficial que la sacó del auto dejó caer su cabeza a propósito.

"De ahí, paré en una ambulancia. Me veo toda ensangrentada, que yo no sabía ni dónde estaba herida", dijo.

La Dama de Blanco cuenta que decidieron trasladarla al hospital militar más cercano, porque en la ambulancia no tenían sutura, ni medicamento para el dolor.

En el hospital le atendieron cinco doctores, que Rodríguez Quesada asegura se mostraron escépticos ante sus quejas y en complicidad con la Teniente Coronel responsable de su caso, que llegó poco después.

Finalmente, le suturaron la herida del codo, pero no atendieron el dolor en un dedo de la mano derecha, a pesar de que el ortopédico aseguró a la oficial que se trataba de una fractura.

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