Las autoridades locales exigen desde estesábado a los venezolanos el pasaporte para ingresar a Perú, una medida que busca regularizar el registro de los migrantes, que se han multiplicado por cuatro en los últimos ocho meses, según el Gobierno del presidente peruano, Martín Vizcarra.
Sólo unos pocos que portan pasaporte, un documento difícil de obtener según los mismos venezolanos, cruzaban la frontera para seguir su ruta, principalmente hacia la capital, Lima.
"Hay cientos que han entrado con solicitud de refugiado, es un procedimiento que está permitiendo el ingreso de personas que no tienen pasaporte", dijo a Reuters en jefe de la oficina de la Defensoría del Pueblo en Tumbes, Abel Chiroque.
Otros cientos, como niños, personas enfermas, ancianos y gestantes, han podido ingresar por razones humanitarias solo con cédulas de identidad, agregó. "Tenemos que velar la acción humanitaria frente a la población vulnerable", afirmó.
Familias casi enteras, ancianos y mujeres embarazadas que cruzaron Ecuador y Colombia hacían filas en el puesto fronterizo peruano de Tumbes para tramitar esta forma de ingreso, que parece haberse convertido en una alternativa de los venezolanos que huyen de la crisis económica y humanitaria de su país.
Más de 400.000 venezolanos se encuentran en Perú, cuatro veces más que a fines del año pasado. De esa cifra, unos 70.000 ya tienen el Permiso Temporal de Permanencia (PTP), que les permite trabajar legalmente en el país. Otros 100.000 iniciaron el trámite para obtener ese documento, según datos oficiales.
Perú también ha cambiado el marco temporal para otorgar el PTP. Ahora, para poder postular a ese permiso deben ingresar al país hasta el 31 de octubre y no hasta el 31 de diciembre.
Aunque el número de migrantes se redujo en la frontera peruana por la exigencia del pasaporte, se teme que el flujo vuelva aumentar en los próximos días, luego de que Ecuador dejó sin efecto de forma temporal una medida similar.
Chiroque advirtió, asimismo, que ha recibido denuncias de posibles casos de trata de personas, en momentos en que se registra que muchos adolescentes y niños viajan solos o acompañados de personas que no son sus familiares directos.
"Tenemos, por ejemplo, siete niños que estaban viajando sin sus padre y que ahora están en un albergue estatal de Tumbes a la espera de solucionar su situación", dijo el funcionario.
El éxodo desde Venezuela se está acercando a un momento comparable con la crisis de los refugiados en el Mediterráneo,según Naciones Unidas. Representantes de los gobiernos de Colombia, Ecuador y Perú se reunirán la próxima semana en Bogotá para buscar una salida a la crisis.
(Con información de la agencia Reuters)