Las vacunas desarrolladas por Cuba contra el COVID-19 no tienen autorización de uso de emergencia de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y no se pueden comprar para países de las Américas, dijo el martes esta entidad.
El subdirector de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Jarbas Barbosa, recordó que las vacunas, Abdala y Soberana, necesitan esa autorización antes de que puedan ser suministradas por el fondo rotatorio de la OPS que apoya el acceso equitativo a las vacunas a través de la instalación COVAX dirigida por la OMS.
Esta semana las autoridades sanitarias en la isla anunciaron que comenzarán a vacunar a los adolescentes y a los niños para mediados de septiembre como parte de una campaña para inmunizar a más del 90% de la población para diciembre.
Los menores entre los 2 y 18 años recibirán al menos dos dosis de la vacuna Soberana-2 a partir del 3 de septiembre.
El comportamiento del COVID-19 en Cuba cerró el 31 de agosto con 6, 609 nuevos casos detectados y 74 decesos.
Pinar del Río es la provincia que ocupa el primer lugar entre las más castigadas por la pandemia con 1, 267 casos, seguida por La Habana, con 773 casos y Cienfuegos con 611, según el informe ofrecido por el Ministerio de Salud Pública (MINSAP).
Durante la semana pasada, Cuba promedió entre 6.500 y 7.000 casos por día y entre 70 y 80 muertes, una reducción significativa respecto de hace unas semanas, pero sigue siendo una de las tasas más altas del mundo en términos de casos por cada 100.000 habitantes.