Los conductores de bicitaxis ven en una nueva medida impuesta esta semana por el Ministerio de Transporte de Cuba (Mitrans) una verdadera limitación a su negocio.
La norma, que entró en vigor el 20 de abril, obliga a los transportistas privados a renovar sus licencias operativas, a colocar una placa en sus vehículos y limitar la circulación al municipio donde esté inscrito el chofer.
Bicitaxistas entrevistados por Martí Noticias, mostraron dudas, descontento y desaliento y algunos se quejan de que no están renovando las licencias y se deciden a operar corriendo el riesgo de ser multados y de perder sus bicicletas.
Un inspector del MITRANS entrevistado por la agencia Cubanet, asegura que los bicitaxis dejaron de ser un paliativo de la crisis del transporte para convertirse en un verdadero obstáculo, una “epidemia vial”.
“Cuando se comenzaron a extender las primeras licencias, estas tenían carácter nacional y el conductor, aunque fuera de Santiago de Cuba, por ejemplo, si tenía residencia en La Habana, podía trabajar aquí. Eso hizo que en poco tiempo los bicitaxis en circulación aumentaran de unos cientos a miles, en una ciudad donde las calles no son las mejores, la mayoría son estrechas, están en mal estado, son vías de mucha circulación y se fueron convirtiendo en un obstáculo y en un peligro. (…) La medida solo busca darle una solución efectiva al caos actual, curar lo que sin dudas es una verdadera epidemia vial”, declaró a Cubanet el inspector Pablo Trujillo.
Otro inspector del MITRANS, Jorge González, dijo a la publicación que ya la mayoría no representan un apoyo al transporte, "en cualquier esquina encuentras decenas de bicitaxistas sin hacer nada, cobrando tarifas excesivas por tramos de menos de un kilómetro que no lo valen, esperando por los turistas ingenuos que pagan 5 o 10 dólares por una vuelta al Prado. (…) No es (una medida) abusiva. Durante un año se les dio la oportunidad de que hicieran la inscripción para la nueva licencia y muchos no lo hicieron”.
[Con información de TV Martí y Cubanet]
