Miembros en el exilio de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) exigieron en Austin, Texas, una fe de vida del líder de esa organización opositora, José Daniel Ferrer, y otros tres activistas detenidos el 1 de octubre de manera abrupta y violenta.
Los activistas permanecieron en las calles de Austin con carteles y consignas para expresar su descontento y exigir la liberación de los miembros de UNPACU. Pidieron, además, una fe de vida de los detenidos que se encuentran incomunicados desde hace ya casi un mes.
Decenas de oficiales del ministerio de interior irrumpieron el martes 1 de octubre la sede de UNPACU y detuvieron al líder de la organización y tres activistas: José Pupo Chaveco, Fernando González Vaillant y Evert Luis Hidalgo.
Un pedido de Habeas Corpus a favor de Ferrer y los otros detenidos fue negado por el Tribunal de Santiago de Cuba.
Los activistas de UNPACU permanecen bajo acoso y amenazas por parte régimen desde el mes de septiembre, cuando la organización convocara a una protesta pública el día de la Virgen de la Caridad del Cobre, Patrona de Cuba.
El pasado viernes los dos hijos de Ferrer, Fátima Victoria Ferrer Cantillo, de 14 años, y José Daniel Ferrer Cantillo, de 17, fueron esposados y golpeados mientras exigían una fe de vida de su padre.
Los acompañaba, con su bebé en brazos, Nelva Izmaray Ortega, esposa de Ferrer, quien detalló a Radio Martí el abuso del que fue objeto en pleno Parque Céspedes, en Santiago de Cuba. "Me decían: cállate, cállate, deja que estemos solitos que te vamos a quitar a tu hijo... y la golpiza que te vamos a dar, que de terapia vas a salir" aseguró la mujer.
Organizaciones defensoras de derechos humanos han criticado las irregularidades en el caso de Ferrer y exigido al régimen cubano la inmediata liberación del opositor.
