Los ministros de Exteriores de Estados Unidos, Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, el Reino Unido y el Alto Representante de la Unión Europea, muestran grave preocupación en un comunicado conjunto por la decisión de China de imponer una ley de seguridad nacional en Hong Kong.
La decisión de China no está en conformidad con la Ley Básica de Hong Kong y sus compromisos internacionales bajo los principios de la Declaración Conjunta Chino-Británica legalmente vinculante, registrada por la ONU, aseguran los cancilleres en una declaración conjunta.
Agregan que la ley de seguridad nacional propuesta correría el riesgo de socavar seriamente el principio de "Un país, dos sistemas" y el alto grado de autonomía del territorio. Pues pondría en peligro el sistema que permitió que Hong Kong floreciera y convirtiera en un éxito durante muchos años.
El debate abierto, la consulta con las partes interesadas y el respeto de los derechos y libertades protegidos en Hong Kong son esenciales, dicen los ministros de Exteriores.
También "nos preocupa mucho que esta acción reduzca y amenace los derechos y libertades fundamentales de toda la población protegida por el estado de derecho y la existencia de un sistema de justicia independiente".
Los ministros terminan instando encarecidamente al Gobierno de China a que reconsidere esta decisión.