El Premio Sajarov 2010, Guillermo Fariñas, fue detenido y maltratado por la policía del centro de detenciones conocido por UNPICO en Santa Clara, con tanta violencia que terminó en la sala de urgencias de hospital Arnaldo Milián, de la misma ciudad.
Fariñas fue detenido junto al activista de Derechos Humanos Yunier Santana Hernández cuando intentaban visitar a la opositora Damaris Moya, quien realiza una huelga de hambre, para protestar por el silencio de las autoridades ante la amenaza de violación contra su hija de cinco años.
“Llegamos frente a la casa y fuimos abordados por miembros del MININT (Ministerio del Interior) y de las brigadas especiales y me dijeron que no podíamos pasar” explica Fariñas.
Luego un miembro de la brigada espacial “sin un razón todavía plausible nos detuvo, y aunque le advertí de mi situación de salud, no los escuchó y fui esposado y maltratado”, continúa el activista del FANTU (Foro Antitotalitario Unido).
“Con Yunier y conmigo hubo exceso de violencia. Nosotros no ofrecimos resistencia, ni tan siquiera protestamos en alta voz, sólo decidimos regresarnos. Sin embargo, las autoridades nos agredieron”.
El Premio Sajarov 2010 ve en este acto una muestra más de que “la brutalidad policial y la tortura forman parte del mentalidad de los policías cubanos” porque en este caso, explica Fariñas, ellos no gritaron consignas ni ofrecieron resistencia.
Fariñas fue detenido junto al activista de Derechos Humanos Yunier Santana Hernández cuando intentaban visitar a la opositora Damaris Moya, quien realiza una huelga de hambre, para protestar por el silencio de las autoridades ante la amenaza de violación contra su hija de cinco años.
“Llegamos frente a la casa y fuimos abordados por miembros del MININT (Ministerio del Interior) y de las brigadas especiales y me dijeron que no podíamos pasar” explica Fariñas.
Luego un miembro de la brigada espacial “sin un razón todavía plausible nos detuvo, y aunque le advertí de mi situación de salud, no los escuchó y fui esposado y maltratado”, continúa el activista del FANTU (Foro Antitotalitario Unido).
“Con Yunier y conmigo hubo exceso de violencia. Nosotros no ofrecimos resistencia, ni tan siquiera protestamos en alta voz, sólo decidimos regresarnos. Sin embargo, las autoridades nos agredieron”.
El Premio Sajarov 2010 ve en este acto una muestra más de que “la brutalidad policial y la tortura forman parte del mentalidad de los policías cubanos” porque en este caso, explica Fariñas, ellos no gritaron consignas ni ofrecieron resistencia.