Desde que los Dodgers de Los Angeles firmaron en 2018 al cubano Andy Pagés como agente libre internacional, se hablaban maravillas del jardinero nacido en Pinar del Río a fines del año 2000.
Luego de desforrar pelotas por cinco temporadas en Ligas Menores, Pagés debutó finalmente en Grandes Ligas el pasado 16 de abril y le tomó poco tiempo hacer los ajustes necesarios para adaptarse al mejor béisbol del mundo.
En la semana del lunes 22 al domingo 28 de abril, el pinareño resultó el cubano más destacado en las Mayores, al disparar nueve hits en 25 turnos, para un average de .360, con cinco carreras anotadas y dos impulsadas.
Como extrabases, Pagés ligó para de dobletes y un jonrón en los últimos siete días, para un promedio de slugging de .560.
En 11 juegos desde que debutó, batea para average de .302, con par de bambinazos, cuatro biangulares, diez anotadas y cinco remolques.
Gran semana tuvo también el zurdo habanero Adrián Morejón, de los Padres de San Diego, quien parece encaminado a su temporada consagratoria, después de superar múltiples obstáculos desde su debut hace cinco años, que incluyeron una cirugía Tommy John.
Morejón, quien se proyectaba como abridor al inicio de su carrera en 2019, se ha convertido en uno de los relevistas más confiables del manager Mike Shildt, a juzgar por lo conseguido en el primer mes de temporada.
En la semana, el zurdo trabajó en dos partidos, para un total de cinco innings y un tercio, y lo hizo de manera inmaculada.
Apenas permitió cuatro hits, sin carreras, no regaló boletos y propinó ocho ponches, apoyado en una recta que promedia 98 millas por hora de velocidad.
En lo que va de campaña exhibe efectividad de 0.93, con 15 abanicados en 9.1 episodios de faena.
Y el avileño Yennier Cano sigue consolidándose como un puntal en el bullpen de los Orioles de Baltimore.
En los últimos siete días, Cano salió a trabajar en cuatro desafíos y en total lanzó cinco entradas completas, en las que toleró tres imparables y una limpia, con cinco chocolates y control perfecto, para una efectividad de 1.80.
Frío, frío
El habanero Jorge Soler llegó a los Gigantes de San Francisco con altas expectativas, que hasta ahora ha sido incapaz de cumplir, más allá de algún que otro batazo esporádico y descomunal.
En la semana, Soler apenas consiguió tres cohetes en 21 turnos, para un anémico average de .143, en tanto se ponchó en diez de esas oportunidades.
Aunque suma cinco cuadrangulares, apenas ha conseguido impulsar ocho carreras y no ha hecho esa diferencia ofensiva que esperaban los Gigantes cuando lo contrataron por tres años y 42 millones de dólares en el invierno.
Foro