La denuncia señala que las autoridades judiciales impusieron la pena máxima a Tenzin Delek Rinponche durante un juicio a puerta cerrada. El monje fue acusado de financiar un atentado en la provincia de Sinchua en el año 2002 que dejó tres heridos.
Un vocero de Human Rights Watch dijo que la sentencia muestra que el gobierno de China no tolera las actividades polìticas o religiosas independientes.
El grupo también informò que la aplicación de la sentencia ha sido suspendida por dos años, con la posibilidad de que sea conmutada a cadena perpetua. Un familiar lejano del monje tibetano fue declarado culpable de la explosión de la bomba y ejecutado el año pasado.