El preso político Carlos Manuel Figueroa Álvarez fue puesto en libertad tras cumplir la totalidad de una sentencia de seis años de privación de libertad.
El Tribunal Municipal de 10 de octubre, en La Habana, sentenció que el opositor, miembro del Movimiento Antorcha Martiana, era culpable por los delitos de Desobediencia, Desacato y Atentado, luego de que se manifestara con consignas antigubernamentales en el Parque Central, el 4 de noviembre de 2016.
Ese día, a los pies de la estatua de José Martí y junto a los activistas Santiago Roberto Montes de Oca Rodríguez, Celso Luis Díaz Morales y José Luis Piloto Monterrey, reclamó "Libertad para el pueblo de Cuba", "Viva la Democracia", "Vivan los Derechos Humanos", "Abajo Raúl Castro" y "Abajo la Dictadura".
Más adelante en prisión, resultó sancionado nuevamente.
Recluido inicialmente en el penal Combinado del Este de La Habana, fue trasladado a la cárcel de Boniato, en Santiago de Cuba, a más de 800 kilómetros de su vivienda, poco tiempo después del levantamiento popular del 11 de julio por el que cientos de personas fueron encarceladas.
“Para mí son muchachos muy valientes. Yo me puse muy contento cuando vi la juventud tirada en la calle por la necesidad, por los problemas que hay. Ha llegado el momento que la juventud ha dicho ¡basta! Vi una gran valentía entre la juventud”, dijo el activista recién excarcelado.
“Me llenó de orgullo, no solamente a mí, a muchas personas ahí que viven calladas por miedo, que hay mucho temor allí en la cárcel. Pero muchas personas se regocijaron ahí de que la juventud ha dicho ya basta de tanta injusticia, tanta impunidad que hay en el país, de tanta necesidad que hay, que no haya libertad. La juventud ya hoy en día está defendiendo de un modo u otro sus derechos y los de las familias el que está sufriendo constantemente”, resaltó.
Figueroa forma parte del grupo de los 53 presos políticos que fueron excarcelados en enero de 2015 como parte del acuerdo de restablecimiento de relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos, impulsado por el presidente Barak Obama. Pero fue detenido meses después, el 30 de septiembre de 2015, luego de saltar la cerca de la sede diplomática de Estados Unidos en La Habana, un día después que las autoridades estadounidenses le negaran el refugio político.
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