Designado por la legislatura del estado de la florida y presentado por el comisionado de Miami, Francis Suárez, se le dio a una céntrica calle de Miami el nombre del doctor Oscar Elías Biscet.
El comisionado Suárez destaco que era un privilegio “honrar uno de los mejores luchadores por los derechos humanos y la justicia de nuestra comunidad cubana y americana”.
Con esta ceremonia, la nueva generación cubanoamericana busca tender un puente de solidaridad con la sociedad civil cubana independiente. En el evento estuvo presente la legisladora federal Ileana Ros Lehtinen, quien destacó que “es muy importante destacar de los pinos nuevos, como Francis Suárez, esta nueva generación que nacieron aquí, que se han criado aquí, que no conocen cuba; que no han estado ahí, pero tienen a Cuba siempre en sus corazones.
Después de manifestar por vía telefónica su agradecimiento por el honor que le otorgaron, Biscet reclamó que el gobierno cubano respete los derechos ciudadanos y aprovechó la ocasión “para exigir la libertad de todos los prisioneros políticos y de conciencia que permanecen en las cárceles del régimen castrista. También me solidarizo con el ciudadano americano Alan Gross injustamente condenado en Cuba.
El nombrar la calle honra al hombre que ha luchado por la democracia en cuba y fortalece los vínculos entre el exilio cubano y la oposición interna.
Ángel Garrido, quien representa a Biscet en el exterior indicó que se ha reactivado el Club de Amigos de los Derechos Humanos por el que fue preso político y dedica esta calle al pueblo de Cuba.
El comisionado Suárez destaco que era un privilegio “honrar uno de los mejores luchadores por los derechos humanos y la justicia de nuestra comunidad cubana y americana”.
Con esta ceremonia, la nueva generación cubanoamericana busca tender un puente de solidaridad con la sociedad civil cubana independiente. En el evento estuvo presente la legisladora federal Ileana Ros Lehtinen, quien destacó que “es muy importante destacar de los pinos nuevos, como Francis Suárez, esta nueva generación que nacieron aquí, que se han criado aquí, que no conocen cuba; que no han estado ahí, pero tienen a Cuba siempre en sus corazones.
Después de manifestar por vía telefónica su agradecimiento por el honor que le otorgaron, Biscet reclamó que el gobierno cubano respete los derechos ciudadanos y aprovechó la ocasión “para exigir la libertad de todos los prisioneros políticos y de conciencia que permanecen en las cárceles del régimen castrista. También me solidarizo con el ciudadano americano Alan Gross injustamente condenado en Cuba.
El nombrar la calle honra al hombre que ha luchado por la democracia en cuba y fortalece los vínculos entre el exilio cubano y la oposición interna.
Ángel Garrido, quien representa a Biscet en el exterior indicó que se ha reactivado el Club de Amigos de los Derechos Humanos por el que fue preso político y dedica esta calle al pueblo de Cuba.