Un exagente de la Seguridad del Estado y la Policía Técnica Investigativa (PTI) en Camagüey, que denunció actos de corrupción de altos oficiales de esos cuerpos militares, ha exigido a las autoridades la revisión de su caso.
Deivis Socarrás Marín se encuentra en huelga de hambre en la cárcel Kilo 9, reclamando ser atendido por la Fiscalía Nacional, según denunciaron a Radio Martí dos activistas de derechos humanos.
"Mientras Socarrás Marín trabajaba como agente de la PTI detectó a varios oficiales como el Teniente Coronel Sifonte, al Teniente Coronel Irán y el Teniente Coronel Casimiro quienes incurrían en graves delitos, y quienes se encontraban involucrados con varios elementos delictivos a los cuales tenían robando para ellos", explicó Yordan Marrero Huerta, del Partido Demócrata Cristiano en Camagüey.
Virgilio Mantilla Arango, expreso político que acaba de cumplir una condena de un año en la misma prisión, confirmó lo dicho por Marrero Huerta.
"El no quería pertenecer más a esa cadena de injusticia", recalcó Mantilla Arango, y agregó que según el encarcelado, en el PTI se cometen muchas arbitrariedades e injusticias.
En una misiva dirigida a activistas de derechos humanos, el recluso señala que los oficiales "obtenían ganancias lucrativas de esos robos con fuerza y robo con violencia, y además mantenían relaciones sexuales con familiares de estos elementos delictivos" bajo su mando.
Socarrás Marín pasó a sus superiores la información sobre delitos cometidos por oficiales a los Órganos de Seguridad del Estado, pero el mismo jefe del PTI, Teniente Coronel Sifonte, lo responsabilizó en el 2007 por varios delitos que asegura no haber cometido.
Recibió una condena de 11 años de cárcel por tres causas diferentes, una de ellas por el supuesto delito de hurto. Aunque su caso fue revisado por la Fiscalía General de la República, Socarrás Marín permanece en prisión.
La investigación "arrojó el resultado de que Socarrás Marín era inocente, y se exigía ponerlo en libertad inmediatamente, pero han transcurrido 10 años ya", y continúa encarcelado, dijo Mantilla Arango.
El expreso político señaló que el exagente lleva casi 10 años recluido, y se le han negado todos los beneficios y derechos legales que le corresponden.
"En este preciso momento Deivis Socarrás Marín lleva ocho días en huelga de hambre reclamando su libertad. Él se considera un preso político y es su concepto personal", concluyó Marrero Huerta.
(A partir de un reporte de Luis Felipe Rojas para Radio Martí)