Es una práctica que se ha vuelto cada vez más común entre los habaneros que aspiran a conducir un medio de transporte motorizado. Los inspectores de tránsito aceptan sobornos del aspirante a chófer, y le permiten burlar el examen práctico. El monto de dinero a pagar depende de la categoría del vehículo a obtener. Los involucrados por ambas partes pueden ser procesados por un delito de cohecho, de ser descubiertos y encausados.
La licencia de conducir se obtiene en Cuba realizando dos exámenes, uno teórico y otro práctico. Este último representa la plataforma de toda la corrupción existente en el sistema. No se resuelve a simple vista, solo se llega a las personas involucradas como recomendado.
Hasta ahora no se conoce de alguien que haya sido procesado, entre los inspectores con categoría de profesor de tránsitos implicados. De ser descubiertos, “se les sancionaría por el delito de cohecho, que incurre en una sanción de privación de libertad de cuatro a diez años”, aclara Ernesto García, abogado.
Confiesan los “beneficiados”
“Todos mis amigos que tienen licencia de conducir han pagado por ella. Estamos hablando de unas 12 personas”, asegura Juan Miguel Torres, de 35 años.
Uno de los “beneficiados”, que no quiso revelar su identidad, pagó para tener el permiso de conducir y cuenta que, después de suspender varias veces el examen práctico, “en una conversación con mis amistades, supe que lo podía solucionar con dinero”.
Comenta que le consiguieron un “contacto” que conocía a uno de los oficiales de tránsito que examina. “Todo fue rápido, di mi vuelta en el carro para aparentar con la rutina y en el trayecto le pagué al oficial los 100 dólares acordados por la licencia categoría B”, señala.
Otra experiencia fue a cargo del amigo de Ángel Martínez. “El muchacho aprobó la categoría B, pero cuando buscó pasar la categoría C tuvo que pagar 150 dólares para no tener trabas en el proceso”, cuenta Ángel.
Señala además que su amigo le aseguró que “mientras más difícil es la categoría, mayor es el monto de dinero a pagar”.
Las categorías de vehículos van desde A-1: Ciclomotor, A: Motocicleta, B: Automóvil, C-1 y C: Camión, D-1: Microbús, D: Omnibús, E: Articulado y F: Agro industrial y de la construcción.
La historia de quienes no lo consiguen
Pero no todo el mundo puede pagar y tener el documento, así nos confirma Tomás González, de 33 años. “Mi primo José trató de sobornar al inspector que lo estaba examinando y no logró aprobar”.
Este anduvo con suerte pues el abogado Ernesto García, nos precisa que “el que realiza el soborno es igualmente acusable de un delito de cohecho, con una sanción de cinco años de privación de libertad o multa de quinientas a mil cuotas o ambas”. “Este tipo de delito, según el caso, se combina con la sanción accesoria de confiscación de bienes”, puntualizó García.
Según un oficial de tránsito (caballito), que no se identificó, “está establecido que toda persona con 18 años de edad (edad establecida para poder optar por el permiso) que apruebe el teórico, tiene 6 meses de plazo, con tres oportunidades para realizar el examen práctico. De suspender en las tres oportunidades, tiene que abrir un nuevo expediente, comenzar desde cero”.
La adquisición del permiso de conducir por vías ilegales, puede poner en peligro la vida de peatones y chóferes en la vía. Según la Oficina de Estadísticas de Cuba (ONEI), el no respetar el derecho de vía, no atender el control del vehículo y el exceso de velocidad siguen siendo las principales causas de accidentes de tránsito en el país.
Publicado por Andy Sierra en Cubanet