Decenas de activistas de Derechos Humanos, Damas de Blanco y dos reporteros independientes fueron arrestados y golpeados este domingo en La Habana luego de participar en el encuentro semanal que realizan en el parque Gandhi de Miramar integrantes de diferentes organizaciones opositoras.
En el Oriente de la isla, en Santiago de Cuba una decena de las que integran Ciudadanas por la Democracia fueron víctimas de violencia policial.
Antonio Rodiles, director del proyecto Estado de Sats y promotor del Foro por Derechos y Libertades, dijo a Martí Noticias que ayer por quinto domingo consecutivo los detuvieron violentamente e introdujeron en carros jaulas cuando se dirigían a la parada del ómnibus en 28 y 3ra. en Miramar, en La Habana, para llevarlos al centro de detención en Tarará, donde estuvieron por varias horas.
"Fue una jornada de excesiva violencia contra la sociedad civil que sale a las calles a ejercer el derecho a la libertad de expresión, de movimiento de pensamiento y asociación", afirmó.
Rodiles denunció que la represión fue más intensa que semanas atrás y "todo parece indicar que el régimen está buscando que lo rutinario apague la noticia".
El activista pidió apoyo internacional ante lo que está ocurriendo en la isla y alertó que "están siendo violentamente reprimidos por defender el derecho a manifestarnos pacíficamente".
El reportero Lázaro Yuri Valle, nuevamente arrestado cuando cubría las actividades dominicales, dijo que en esta ocasión resultaron detenidas 63 mujeres y 30 opositores. Fue conducido junto a los opositores al Centro de Detención de Tarará, donde un oficial de la Seguridad del Estado le advirtió "que no quería ni un video más de los que publica en las redes sociales".
El teléfono fue retenido y le borraron todo el material que filmó ese día, lo que incluye la marcha de las Damas de Blanco y las acciones violentas contra los activistas al momento del arresto.
"Fue una jornada de excesos y brutalidad policial", dijo el reportero, "quieren evitar que divulguemos la brutalidad con que están actuando contra la sociedad civil", aseguró. Valle afirma haber visto la golpiza que le propinaron a Raúl Borges, padre del preso político Ernesto Borges.
También las Damas de Blanco fueron muy golpeadas "cuando las tenían dentro de los recintos donde nadie puede ver la violencia del agresor", señaló Valle.
"Las mantuvieron detenidas por varias horas y de nuevo usaron el método de apretar las esposas de tal manera que las manos se ponían moradas y acalambradas".
En el caso de la Dama de Blanco Jacqueline Boni, en vez de llevarla a Tarará como hicieron con el resto de los detenidos, la mantuvieron en la estación policial del Cotorro por más de ocho horas. Boni destacó que la represión contra la sociedad civil que quiere cambios se ha recrudecido después que se iniciaron las negociaciones entre el presidente de Estado Unidos y el Gobierno cubano.
"Raúl Castro lo que ha hecho es arreciar su terrorismo contra el pueblo inocente" y "esa es la muestra de que no va a cumplir con ningún pacto internacional", dijo.
La activista insistió en que el movimiento cívico cubano lo único que está exigiendo al Gobierno es que decrete una amnistía a los presos políticos y se cumplan los derechos. Por su parte, las fuerzas militares esgrimen como razones para el uso de la fuerza que los activistas están distribuyendo por la ciudad, desde el ómnibus en el que se trasladan los domingos, las fotos de los presos políticos y la hoja de ruta que promueve el Foro por Derechos y Libertades.
La imagen divulgada por Ángel Moya muestra el momento en el que varios activistas esparcían desde un ómnibus las fotos de los presos políticos el domingo 27 de abril mientras en Miramar decenas de opositores eran detenidos.