Con una presentación la noche del viernes en el Opera House de Sarasota, se despidieron Daniela Pérez, Laura Tosar, Diana Martínez, Rafael Quenedit y Francois Llorente, los cinco estudiantes cubanos de la Escuela del Ballet Nacional de Cuba que han pasado el último mes en el curso intensivo de verano de la Escuela Cubana de Ballet de Sarasota, en la Florida.
Junto a estudiantes de Panamá, Puerto Rico, Mexico, Perú y Estados Unidos los muchachos interpretaron fragmentos de La Bella Durmiente, Diana y Acteón, El Corsario y Don Quijote.
Para los dueños de la Escuela de Ballet Cubano de Sarasota, Ariel Serrano y Wilmian Hernández, se trata de un hecho especial compartir la experiencia del entrenamiento y el montaje de la gala con una de sus antiguas profesoras, la bailarina y destacada maitre de ballet Ramona de Sáa, directora de la Escuela Nacional de Ballet de Cuba.
El sentimiento es mutuo. En entrevista con martinoticias.com la profesora de 73 años celebró el trabajo de los Serrano-Hernández en la expansión de la enseñanza del sistema cubano de ballet en los Estados Unidos.
Los jóvenes han quedado maravillados con la experiencia, e incluso dos de ellos, que aún necesitan otro año para graduarse esperan regresar el próximo verano.
Con esta gala también se despide a unos de sus primeros graduados, Francisco Serrano, hijo de los fundadores y dueños de la Escuela, quien ganó una beca de estudios con el Royal Ballet de Londres.
