Dos meses sin llamadas telefónicas pasará el preso político Andy García Lorenzo por intentar ayudar a otros reos que, por diversas razones, no reciben alimentos de parte de sus familiares en la cárcel de Guamajal, en Villa Clara.
Su hermana, Roxana García Lorenzo, así lo comunicó a través de una transmisión en vivo en su página de Facebook.
Según Roxana, dos semanas atrás recibió una llamada de su hermano desde la cárcel en la cual le daba los nombres de otros prisioneros que, por diferentes motivos, no recibían ayuda de sus familiares, por lo que fue trasladado a la prisión de Guamajal, y advertido de que “si él seguía ayudando a los presos”, lo acusarían además de “Instigación a delinquir”.
El pasado sábado, su familia acudió a la prisión sin poder obtener ninguna información sobre García Lorenzo y, al siguiente lunes, volvieron, esta vez con una petición de Habeas Corpus. No fue hasta el viernes, 8 de diciembre, que lograron verlo.
“Está bien; mental y físicamente está bien, y nos dijo que él no fue golpeado: fue encadenado de pies y manos con las ‘shakiras’; incluso, le pusieron el uniforme naranja de los presos comunes, pero ya luego le volvieron a poner el (uniforme) gris. Está en una celda aislada junto a otro preso, supuestamente por el Covid”, explicó la hermana de García Lorenzo.
La joven dijo que su hermano fue castigado a dos meses sin llamadas telefónicas.
"Le quitaron las llamadas por el hecho de intentar ayudar a unos presos. Lo amenazaron también con que, ‘lo que nosotros hiciéramos acá afuera, iba a repercutir en lo que pasará con él en el juicio”, concluyó.
(Con reporte de Ivette Pacheco para Radio Martí)