Con manifestaciones, pintadas, y bloqueos de calles y autopistas, la protesta siguió viva la noche del lunes en la capital de Venezuela.
Manifestaciones nocturnas, bloqueos de calles y posteriores disturbios, producto de la aparición de grupos armados que pretendían disolver las protestas, tuvieron lugar la noche del lunes en sectores del este de Caracas
Reporteros del diario El Universal constataron los nuevos tranques de calles que, según los organizadores, buscaban enviar un mensaje al Táchira, estado que ha sufrido los peores episodios de violencia y represión.
Manifestantes en la zona de El Cafetal aseguraron que fueron agredidos por colectivos, quienes llegaron simulando un entierro y cometieron desmanes en el sector. Al enterarse de lo ocurrido, mucha gente bajó de sus residencias para participar en los reclamos.
El tráfico también se vio afectado y pasadas las 8:30 p.m. estaban congestionadas varias avenidas en el área.
El matutino caraqueño reporta que mientras tanto, residentes de los barrios de Petare y Catia salieron a manifestar pacíficamente en apoyo al movimiento estudiantil venezolano.
En Petare las protestas fueron precipitadas por el hecho de que llevan 20 días sin servicio de agua; los residentes participaron en una asamblea de ciudadanos junto a los de Terrazas del Ávila, con quienes acordaron unir esfuerzos para manifestar.
Pasadas la doce de la noche, los reunidos salieron a cerrar por varios minutos la entrada a la avenida Boyacá y la autopista Gran Mariscal de Ayacucho. Funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) llegaron al lugar y dispersaron a los manifestantes con gases lacrimógenos y disparando perdigones.
La crónica de El Universal precisa que en Catia un grupo de vecinos se acercó a la avenida Bolívar para pintar un SOS en señal de protesta, pero a los pocos minutos llegaron sujetos, presuntamente miembros de los colectivos, y obligaron a suspender la actividad. No obstante, los vecinos volvieron a salir más tarde y terminaron la pintada.
También hubo enfrentamientos en Chacao y en la autopista Prados del Este, donde la Guardia Nacional Bolivariana lanzó decenas de bombas lacrimógenas.
Reporteros del diario El Universal constataron los nuevos tranques de calles que, según los organizadores, buscaban enviar un mensaje al Táchira, estado que ha sufrido los peores episodios de violencia y represión.
Manifestantes en la zona de El Cafetal aseguraron que fueron agredidos por colectivos, quienes llegaron simulando un entierro y cometieron desmanes en el sector. Al enterarse de lo ocurrido, mucha gente bajó de sus residencias para participar en los reclamos.
El tráfico también se vio afectado y pasadas las 8:30 p.m. estaban congestionadas varias avenidas en el área.
El matutino caraqueño reporta que mientras tanto, residentes de los barrios de Petare y Catia salieron a manifestar pacíficamente en apoyo al movimiento estudiantil venezolano.
En Petare las protestas fueron precipitadas por el hecho de que llevan 20 días sin servicio de agua; los residentes participaron en una asamblea de ciudadanos junto a los de Terrazas del Ávila, con quienes acordaron unir esfuerzos para manifestar.
Pasadas la doce de la noche, los reunidos salieron a cerrar por varios minutos la entrada a la avenida Boyacá y la autopista Gran Mariscal de Ayacucho. Funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) llegaron al lugar y dispersaron a los manifestantes con gases lacrimógenos y disparando perdigones.
La crónica de El Universal precisa que en Catia un grupo de vecinos se acercó a la avenida Bolívar para pintar un SOS en señal de protesta, pero a los pocos minutos llegaron sujetos, presuntamente miembros de los colectivos, y obligaron a suspender la actividad. No obstante, los vecinos volvieron a salir más tarde y terminaron la pintada.
También hubo enfrentamientos en Chacao y en la autopista Prados del Este, donde la Guardia Nacional Bolivariana lanzó decenas de bombas lacrimógenas.