La coalición opositora descartó la restitución en enero de las conversaciones con el gobierno al que señaló de incumplir acuerdos, situación que aleja la posibilidad de que el país suramericano pueda encontrar una salida negociada a la compleja crisis que enfrenta.
El papa Francisco se refirió este domingo a la situación de Venezuela, e indicó en su mensaje navideño del urbi et orbi que espera que la "valentía" anime a los venezolanos a dar los pasos para poner fin a las tensiones.
"No existen condiciones para restituir el próximo 13 de Enero un diálogo directo", afirmó la Mesa de la Unidad Democrática en un comunicado que difundió el sábado en el que pidió al Vaticano, que actúa como facilitador en el proceso, que active los mecanismos para verificar "el no cumplimiento de los acuerdos" por parte del gobierno.
La alianza opositora sostiene que el oficialismo no acató el compromiso de fijar un cronograma electoral, no liberó a los llamados "presos políticos", no abrió un canal humanitario para recibir alimentos y medicinas del exterior, y mantiene su postura de enfrentamiento y desconocimiento de la Asamblea Nacional de mayoría opositora.
A pesar de la paralización de los diálogos, la Mesa de la Unidad Democrática pidió al Vaticano y al resto de la comunidad internacional mantener la ayuda "política y diplomática".
Las autoridades venezolanas no han emitido hasta el momento ningún comentario en respuesta a la alianza opositora, que es acusada por el oficialismo de incumplir el acuerdo de respeto a los poderes públicos.
El dirigente opositor Henrique Capriles llamó el domingo a la oposición a iniciar un proceso de movilización en todo el país para ejercer "presión social" y lograr unas elecciones generales, proceso que no está previsto en la constitución. "Estamos llamados a organizar, articular, movilizar al país para que ejerza presión social", dijo Capriles en un mensaje que difundió en su blog en el que planteó que la alianza opositora debe "relanzarse" y plantear una nueva ruta que permita a los venezolanos salir de la difícil situación que enfrentan.
Desde inicios de mes está paralizada la mesa de diálogo que promueven el Vaticano y un grupo de ex presidentes, con el apoyo de Unasur, debido a mutuas acusaciones de las partes sobre el incumplimiento de los acuerdos. Los facilitadores propusieron una reunión para el 13 de enero para retomar las conversaciones, pero es poco probable que ese encuentro se dé ante la postura asumida por la alianza opositora.
La crisis económica que enfrenta Venezuela se agudizó en plena época de Navidad ante la galopante inflación y los crecientes problemas de escasez alimentos, medicinas y otros bienes, al que se sumó ahora la falta de dinero efectivo.
Las tensiones se crisparon la semana pasada ante los violentos disturbios y saqueos de comercios que se registraron en algunas ciudades del país tras la medida que adoptó Maduro de eliminar el billete de 100 bolívares, que es el de mayor denominación, para combatir el contrabando de papel moneda hacia Colombia.
El mandatario revirtió la medida un día después de su entrada en vigencia, y extendió hasta el 2 de enero la circulación de los referidos billetes. Maduro también levantó recientemente el cierre de las fronteras con Colombia y Brasil que adoptó para combatir del contrabando de papel moneda, y acordó una progresiva reapertura de los pasos fronterizos.
Con material de varias agencias de prensa (EFE< AP) y prensa nacional venezolana.