Venezuela fracasó este martes en su intento de evitar la reunión del Consejo Permanente de la OEA, para analizar la situación de ese país, alegando que la misma violaba la carta constitucional de esa institución.
El Orden del Día de la reunión fue aprobado por 20 votos a favor, 11 en contra, 2 abstenciones y uno ausente.
Venezuela expresó su oposición sobre “la base y contenido” de la reunión que fue convocada para discutir el tema de Venezuela sin su consentimiento, dijo el embajador permanente de viceministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, presente en la sesión de este martes.
“El carácter de esta discusión es intervencionista, porque viola el espíritu y la letra del Artículo primero de la Carta de la OEA, que declara inviolable la soberanía de los Estados miembros. No es un asunto de tecnicismo jurídico”, subrayó.
La Secretaría de Asuntos Jurídicos respondió que la base de esta reunión se sustenta en el planteamiento de un grupo de Estados que tienen derecho a esa solicitud.
El rechazo de Venezuela fue secundado por sus aliados bolivarianos Nicaragua y Bolivia, quienes también señalaron que no había base legal para la reunión, y que estarían votando por la intervención en un país miembro de la organización.
Tras una hora de interrupciones por parte de las delegaciones de Venezuela, Nicaragua y Bolivia, el Orden del Día fue sometido a votación.
Proponen hoja de ruta para poner fin a crisis en Venezuela
Costa Rica propuso la aprobación de una hoja de ruta, en acuerdo con Venezuela, para poner fin a la crisis estructural que vive ese país, como resultado del deterioro del sistema de salud, la crisis alimentaria y los alarmantes niveles de inseguridad y violencia.
“No podemos continuar siendo indiferentes ante este escenario”, afirmó el delegado costarricense.
Dentro de esa misma visión, la embajadora del Perú expresó el apoyo de su país a la creación de un grupo de países que en colaboración el gobierno de Venezuela busque el diálogo con la oposición para superar la crisis actual.
Canadá recordó la obligación de todos los Estados miembros de la OEA de defender la democracia, y destacó que Venezuela ha de demostrar su voluntad compatible con estos valores.
“En Venezuela hay de hecho una ausencia de valores esenciales y de principios de la Carta Democrática”, afirmó la embajadora canadiense.
Por su parte, México reiteró el llamado a la búsqueda de una salida electoral a la crisis política en Venezuela por la vía pacífica.
“Hoy debemos constatar con preocupación que no se han alcanzado en el proceso de diálogo con la ayuda de facilitadores y la ayuda de la Santa Sede”, afirmó el embajador mexicano, quien llamó a “acordar un calendario electoral", la liberación de los presos políticos y atender el acceso a la medicina y la alimentación.
Las delegaciones de Panamá y El Salvador respaldaron el apoyo al diálogo político que promueven los expresidentes Martin Torrijos y José Luis Rodríguez Zapatero, con la mediación del Vaticano.
La delegación de Haití criticó fuertemente al secretario general de la OEA, Luis Almagro, por su informe sobre la situación política en Venezuela y su pedido de suspensión de ese país de la OEA.
Crisis en Venezuela, "un desafío" regional
“Los planteamientos del Secretario General son muy graves. Si dejamos que siga interviniendo en los asuntos internos de los estados, el futuro de esta organización está en peligro. Nuestro apoyo a Venezuela es un tema de principios”, dijo.
Por su parte, Chile abogó por un diálogo incluyente y abierto en Venezuela, que permita que todas las voces puedan ser escuchadas, con avances, resultados y plazos concretos y definidos.
Colombia, por su parte, afirmó que la crisis que enfrenta Venezuela “representa un desafío para todos nosotros” al recordar que el acto fundacional suscrito por los Estados miembros de la OEA conlleva la obligación de “promover y consolidar la democracia en el continente”.
"Nuestros países no pueden mantenerse indiferentes ante la crisis económica, política o social que pueda presentarse en cualquiera de ellos y “lo que procede, a nuestro juicio, a ayudar al pueblo de Venezuela a resolver su crisis económica y social, y a su país una salida política”, agregó.
Argentina, es uno de los países que ha convocado a esta reunión, "motivada única y exclusivamente por los principios de solidaridad, sin ningún ánimo intervencionista", indicó su embajador.
“Mi gobierno desea reiterar su irrestricto respeto al diálogo y las negociaciones… Pero claro para que ese diálogo no sea nada más que una pantalla es preciso que se avance y que se identifique sin demora una real separación de poderes, garantía de la democracia y de la promoción de los derechos humanos”, afirmó.
EEUU llama a Venezuela a respetar los principios democráticos
Estados Unidos llamó al gobierno de Venezuela a liberar a los presos políticos y de conciencia, respetar a la Asamblea Nacional y a su propia Constitución.
“Estamos aquí porque queremos contribuir a solucionar la crisis en Venezuela antes de que ésta se ahonde más”, afirmó el embajador estadounidense.
"Para que esto ocurra, agregó, el gobierno de Venezuela debe aceptar esta mano tendida por parte de la OEA, para buscar un solución genuina a la crisis", agregó.
El representante de EEUU señaló además que "el informe del Secretario General demuestra el alejamiento del estado de derecho del gobierno de Venezuela" y reiteró el deber de la OEA de "salvaguardar la demacracia y las instituciones de la democracia en las Américas".
"Venezuela tiene que actuar de acuerdo con la Carta Democrática y las instituciones a las que está asociada", subrayó.
Responsabilizan a Venezuela con solución de la crisis
Brasil reiteró su apoyo al informe del Secretario General, Luis Almagro, al tiempo que calificó la situación en Venezuela de “crisis sin precedente en la historia de los estados miembros”.
“Estamos aquí para ayudar. Brasil está listo para coordinar el apoyo a Venezuela a través de un diálogo genuino, pero la responsabilidad para revertir el rumbo actual depende del propio gobierno de Venezuela”, subrayó.
Por su parte, Paraguay pidió la creación de un instrumento del Consejo Permanente que busque un diálogo constructivo entre el gobierno y la Asamblea Nacional, y criticó fuertemente la falta de libertades políticas en Venezuela.
En ese sentido, abogó por la necesidad de que el gobierno de Maduro libere los presos políticos, apruebe un calendario electoral que incluya las elecciones pospuestas, la normalización institucionalidad democrática y el respeto a la Asamblea Nacional.
“El pueblo de Venezuela tiene derecho a la democracia, y el gobierno de Venezuela tiene la obligación de respetarla y promoverla”, subrayó la embajadora del Paraguay.
Llaman al orden a representante de Venezuela
La delegada de Canadá leyó una declaración firmada por 20 países con la propuesta de una resolución del Consejo Permanente que aboga por un diálogo genuino y solidario con Venezuela, y que llama a su gobierno a respetar los derechos humanos y a restaurar el orden constitucional.
“Rechazamos esa grosera declaración del grupo de 20 países que firmaron esa declaración”, dijo el vicecanciller venezolano.
“Nosotros no le hemos dado permiso alguno para referirse a los asuntos internos de Venezuela”, agregó.
“Ustedes están promoviendo un golpe de Estado en Venezuela”, dijo el viceministro venezolano, quien arremetió fuertemente contra el secretario general de la OEA, y señaló las "faltas" a cada nación presente en el debate, con excepción de los Estados aliados.
El embajador venezolano fue llamado al orden por varios países, debido al lenguaje insultante que utilizó en su intervención, y que provocó reacciones de México, Perú, Colombia y Canadá, quienes advirtieron que abandonarían la sesión si no moderaba el tono y se enfocaba en el tema a debate.
Por su parte, Almagro afirmó que el orden constitucional en Venezuela debe ser restaurado con urgencia.
“No es intervencionista la defensa internacional de la democracia, como no lo es la defensa internacional de los derechos humanos”, subrayó. “Los pueblos tienen derecho a la democracia y sus gobiernos la obligación de defenderla y promoverla”.
El secretario general de la OEA dijo que la organización que representa se suma "a los reclamos para restablecer el orden institucional, la liberación de los presos políticos, la separación de poderes, y las soluciones dirigidas a resolver la crisis económica, social y humanitaria de Venezuela".
“No respaldamos ninguna invasión. El llamado a elecciones es lo opuesto a un golpe de Estado. El llamado a elecciones es devolver la soberanía al pueblo, que es a quien pertenece”, concluyó.