Los jefes de Estado y de gobierno de la Unión Europea (UE) dieron, este sábado por la noche, una semana a Rusia para que revierta el curso de la situación en Ucrania so pena de nuevas sanciones.
"El Consejo Europeo está listo para tomar más medidas en función de la evolución de la situación en el terreno", declaró el presidente del mismo, Herman Van Rompuy, luego de una cumbre de mandatarios en Bruselas.
Los mandatarios de la UE pidieron a la Comisión que "prepare de forma urgente" una nueva tanda de sanciones "que estarán listas en una semana", añadió.
Van Rompuy precisó que el lunes comenzarán las consultas entre los Estados miembros. Estas durarán una semana, al cabo de la cual los mandatarios podrán decidir "un proceso de una rapidez sin precedente desde que empezó la crisis".
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, subrayó por su parte que si "continúa aumentando la tensión" en Ucrania "podremos llegar a un punto de no retorno, algo que no es bueno para Rusia y no es algo que queremos".
"No es tarde para una solución política", agregó.