La última encuesta sobre el Brexit, publicada el 24 de junio por la firma Populus, indicaba que un 55% de los británicos apostaba por permanecer y un 45% por salir de la Unión Europea.
Otra encuesta del Evening Standard apuntaba que un 52% votaría por permanecer y un 48% por salir. El análisis de las encuestas realizado por el diario Financial Times reflejaba que los partidarios de quedarse en la UE eran el 47%, frente al 45% que apostaba por el Brexit.
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Pero al final, la decisión, tomada por el 52% de los votantes hizo no sólo que ganará la salida de la UE sino que el primer ministro británico, David Cameron, anunciara su renuncia y ello afectó negativamente a la libra y la bolsa de valores de Londres durante las primeras horas.
En Colombia un estudio hecho por la firma Connecta entre el 21 y el 27 de julio de este año, decía que el 57 por ciento de los consultados asistirían a las urnas cuando el presidente Juan Manuel Santos convocara al plebiscito, mientras que el 43 por ciento decía que era poco probable que lo hiciera.
Así, de los que afirmaron que votarían en el plebiscito, de acuerdo con la medición de Connecta, 65 por ciento estuvieron a favor de aprobar lo acordado en La Habana en el llamado proceso de paz con la guerrilla comunista de las FARC, mientras que el 26 por ciento se inclinó por el ‘No’. Mientras la prensa apoyaba con poca disimulada imparcialidad los acuerdos de paz.
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Según un estudio de Cifras & Conceptos para Caracol Radio y Red + Noticias el Sí en el plebiscito lograría el 54% de apoyo, mientras que el 34% iba por el No y el 12% restante no sabía o no respondía.
Pero, en un resultado sorpresivo, los votantes colombianos rechazaron el acuerdo alcanzado por el Gobierno con la guerrilla marxista de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), sumiendo en la incertidumbre el proceso de paz con los subversivos.
Las autoridades indicaron que el 50,2% de los votantes optaron por el No, mientras sólo el 49 votó por el Sí.
Este miércoles nueve de noviembre en Estados Unidos, los principales diarios, que habían llamado a votar por Hillary Clinton, y criticado acerbamente a Trump, destacan la derrota de la élite político-mediática estadounidense.
"Presidente Donald Trump. Tres palabras que eran impensables para decenas de millones de estadounidenses", escribe el New York Times, que reconoce "un golpe humillante para los medios, los encuestadores y la élite demócrata".
Es la victoria "de los electores rurales y de las zonas industriales siniestradas que estiman que la élite política los abandonó", afirma por su parte el diario Washington Post.
La "cólera estadounidense" que llevó a Trump al poder "es prima mayor de las frondas europeas", señala el diario conservador francés Le Figaro. "Esta nueva realidad no se disolverá como una nube de pólvora al final de una batalla. Ni en una orilla del Atlántico, ni en la otra", afirmó Le Figaro.
El tabloide Daily Mail se congratuló de la "humillación de Hillary, de los encuestadores y las élites económicas y del showbusiness". El diario italiano La Stampa se mostró menos pesimista en un artículo titulado "Trump, un huracán de rabia y descontento".
La victoria de Trump confirma la "vitalidad de la democracia estadounidense, capaz de transformarse continuamente", afirmó el cotidiano. "El resto del mundo debe digerir lo que lo que pasó esta noche: el pueblo de la revuelta golpea a la puerta", concluye La Stampa.
Con tres ejemplos en los últimos meses bastan. Muchos analistas, ahora se preguntan qué está pasando en el mundo que las élites intelectuales, mediáticas y políticas van por un rumbo mientras la realidad terca parece ir por el rumbo exactamente opuesto.