El Senado de Estados Unidos aprobó este martes una resolución para ponerle el nombre del opositor cubano, Oswaldo Payá, fallecido en 2012, a la calle que se encuentra frente a la Embajada de Cuba en Washington.
La medida bipartidista fue propuesta por los senadores republicanos Ted Cruz, Marco Rubio y Rick Scott, y por los demócratas Bob Menéndez, Dick Durbin y Ben Cardin.
Igual propuesta en la Cámara de Representantes realizó en marzo pasado un grupo de legisladores de ambos partidos. Y en el 2021, el senador Cruz presentó un proyecto de ley similar que fue aprobado por el Senado pero no fue presentado en la Cámara.
Después de la aprobación por unanimidad este martes, el senador Cruz dijo en un comunicado que cambiar el nombre de la calle frente a la embajada de Cuba con el nombre de Payá “no sólo rinde homenaje al heroísmo del activista por los derechos humanos, sino que evitará que el régimen comunista cubano pueda borrar e ignorar su legado”.
Menéndez dijo que los senadores "comparten firmemente la visión de Payá de una Cuba libre y democrática, una en la que su pueblo pueda denunciar la opresión sin temor a represalias".
Por su parte, el senador Rubio dijo que “esto servirá como un recordatorio diario para los matones asesinos de las muchas muertes de las que son responsables”.
“A través de la aprobación de nuestra legislación bipartidista para cambiar el nombre de la calle frente a la Embajada de Cuba en Washington, D.C. ‘Oswaldo Payá Way’, estamos honrando el legado de Payá y todos los demás cubanos que continúan aspirando a una Cuba más abierta y democrática”, declaró el senador Durbin.
En un mensaje por Twitter, la hija del opositor, la activista Rosa María Payá, agradeció a los senadores por el esfuerzo en favor de la justicia por crimen contra su padre y Harold Cepero.
El activista Oswaldo Payá y su colega Harold Cepero murieron en el 2012 en un sospechoso accidente de auto en el este de Cuba, un incidente que sus familiares y seguidores siempre creyeron fue ocasionado por el gobierno. El auto iba conducido por Ángel Carromero, que fue sancionado a cuatro años de cárcel por homicidio involuntario, y liberado poco después.
Este lunes, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos dijo que su investigación sobre la muerte de los activistas Payá y Cepero halló al gobierno cubano responsable de las muertes y que había concluido que agentes estatales estuvieron involucrados en el incidente.