La Seguridad del Estado impuso restricción de movimiento y amenazó con imputar de cargos y procesar penalmente a dos miembros de la Asociación Sindical Independiente de Cuba (ASIC) en Cruces, Cienfuegos.
El matrimonio formado por Consuelo Rodríguez Hernández y Lázaro Roberto Aguiar Mendoza, fue citado a comparecer este miércoles en la unidad policial de la localidad.
“Nos estaba esperando la Seguridad del Estado de Cruces, el oficial Camilo y el oficial Adonis. Yo entré primero a la oficina. Me amenazaron con meterme de 2 a 8 años preso”, dijo en un audio enviado a Martí Noticias Aguiar Mendoza, sin precisar el delito por el que los policías pretenden encausarlo.
“Nos prohibieron hacer publicaciones o compartirlas en las redes sociales, tener vínculos con personas contrarrevolucionarias, entre ellos el Secretario de la ASIC, Iván Hernández Carrillo. No podemos salir del municipio”, detalló.
Aguiar Mendoza, enfermero de profesión, se ha quejado en Facebook de la falta de ambulancias y de las condiciones en las que los profesionales de la salud tienen que trabajar en el municipio cienfueguero.
Su esposa, Consuelo Rodríguez, que fue interrogada más tarde por los mismos agentes, también recibió un tratamiento intimidatorio.
“Dijeron que esta era la primera vez que nos estaban llamando la atención y que, si volvíamos a hacerlo, va a haber otras medidas, que podían ser de 2 a 8 años de privación de libertad, que nos harán un registro y decomisarán los teléfonos”.
Ambos sindicalistas fueron advertidos de que, por su actividad en las redes sociales, podrían ser multados bajo el Decreto 370, que incluye la incautación de los dispositivos electrónicos privados.
La organización Prisoners Defenders ha denunciado que la aplicación del 370 es un "gravísimo hecho” que supone la "persecución de la libertad de expresión y otros derechos" en Cuba.
Los integrantes de la ASIC son blanco constante del acoso de las fuerzas del Estado cubanas. El asedio a los sindicalistas ha sido puesto en conocimiento de Gilbert F. Houngbo, director general de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
“Esto se trata de un acto de hostigamiento contra los miembros de la ASIC y nosotros estamos muy preocupados por lo que está sucediendo, toda una vez que el régimen cubano está en un momento de muchas situaciones difíciles, sociales, económicas y políticas, y puede traer consigo una escalada represiva contra los sindicalistas independientes”.
La organización mundial de los trabajadores ha pedido a las autoridades cubanas en más de una ocasión que legalice la ASIC y reconozca el libre sindicalismo en la isla.