En pleno aumento de la desinformación en todo el mundo, la ONU denunció este martes el incremento de la censura y de los ataques contra los periodistas y recordó que "sin prensa no hay libertad".
La organización se adelantó al Día Mundial de la Libertad de Prensa, que se observa el 3 de mayo, con un acto en su sede central para conmemorar el treinta aniversario del inicio de esa celebración anual y analizar los principales problemas a los que los medios se enfrentan actualmente.
Ese panorama es bastante negro, a tenor de los mensajes que expresaron dirigentes de Naciones Unidas, expertos y periodistas.
El secretario general de la ONU, António Guterres, aseveró en un mensaje por video que "básicamente, toda nuestra libertad depende de la libertad de prensa", pero a la vez advirtió que la "verdad está amenazada" por quienes buscan "difuminar las líneas entre lo real y la ficción, entre la ciencia y la conspiración".
Guterres denunció también la "creciente concentración de los medios en unas pocas manos", el colapso financiero que ha acabado con multitud de medios independientes, el aumento de normas que limitan el trabajo de los periodistas y amplían la censura y los ataques que sufren los informadores.
"Los periodistas independientes y las libertades de prensa están bajo ataque en todo el mundo. Sin periodistas que den noticias e información en la que la gente pueda confiar, me temo que seguiremos viendo como se descosen los lazos cívicos, se erosionan las normas democráticas y se debilita la confianza en instituciones y en personas, que son tan esenciales para el orden mundial", advirtió Arthur Gregg Sulzberger, presidente y editor de The New York Times.
Sulzberger comparó esta difícil coyuntura con la "esperanza" que se vivía hace treinta años, cuando se estableció el Día Mundial de la Libertad de Prensa, un momento en el que el fin de la Guerra Fría hacía pensar en una expansión de las libertades y en el que los grandes medios gozaban de una gran fortaleza económica.
Sin embargo, la llegada de internet -con el daño que hizo a ese tradicional modelo de negocio y la facilidad para difundir desinformación- dejaron aquella época en algo pasajero y ha derivado en un periodo de "debilidad para la prensa" que ha desestabilizado democracias y beneficiado a los autócratas, señaló.
El jefe del diario neoyorquino, que dio uno de los discursos centrales de la conferencia de hoy, advirtió de la difícil situación que se vive tanto en países donde las libertades de prensa eran robustas como allí donde ya eran débiles o inexistentes.
En los primeros, dijo, los periodistas se enfrentan ahora a campañas sistemáticas que minan su credibilidad y a ataques contra las protecciones legales que garantizan que puedan hacer su trabajo. En los segundos, sufren cada vez mayores niveles de acoso y violencia, con cifras récord de asesinados y detenidos.
Sulzberger llamó la atención sobre los ataques a la prensa en países como China, Hungría, Egipto, Nicaragua o Rusia. "Hay un ataque global contra los periodistas, su trabajo y el derecho del público a saber".
La directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, alertó de la amenaza que ello supone para todos los habitantes del planeta. "Sin prensa, no hay libertad", dijo citando a la periodista filipina María Ressa, premio Nobel de la Paz en 2021.