La persistente amenaza de un eventual terremoto en Santiago de Cuba tiene aterrados a sus pobladores que por indicaciones oficiales están improvisando hospitales de campaña y hasta han decidido identificar con manillas a los niños, cuando pocos se confían que la aparente calma sea definitiva.
La ocurrencia de cientos de sismos desde el 17 de enero se ha detenido desde el martes pasado, pero expertos han dicho que el riesgo sigue en pie debido a que la corteza ha sufrido una deformación constante anual de un centímetro que tendrá que liberarse en algún momento.
El director del Centro Nacional de Investigaciones Sismológicas, Bladimir Moreno, dijo a Granma que lo más probable es que siga decreciendo la actividad sísmica, pero advirtió que no hay que confiarse.
“El hecho de seguir registrándose en nuestras estaciones sismológicas un alto número de movimientos no perceptibles, indica que el área se mantiene activada”, dijo Moreno.
El especialista dijo, no obstante, que “para una valoración favorable precisa, se requieren más días”.
Autoridades del oficialista Estado Mayor de la Defensa Civil recorrieron el fin de semana sitios de la provincia santiaguera, según reportó el periódico Sierra Maestra, en un intento por aminorar el pánico en una ciudad con un deteriorado fondo habitacional.
Unos 15 puntos de concentración masiva han sido habilitados en caso de terremoto, dijo el diario.
Las autoridades están llamando a la ecuanimidad pero a la vez han indicando en las escuelas que cada niño lleve una manilla de identificación donde aparezcan datos como el nombre, número de identidady teléfonos para localizar a sus familiares, según dijeron pobladores al periodista Adriel Reyes, de Radio Martí.
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Santiagueros consultados por Radio Martí explicaron que la medida de llevar manillas está vigente también para los menores que ingresan en hospitales locales.
Un reporte de la revista OnCuba, basada en La Habana, reseñó la angustia de una madre santiaguera que cada día debe dejar a su hijo pequeño en el círculo infantil para ir a trabajar.
“Es por los temblores”, dijo la mujer aludiendo al brazalete que lleva su hijo en el brazo. “Todos los niños del círculo tienen que ponerse una y hasta en las escuelas primarias están haciendo lo mismo”, explicó a OnCuba.
Improvisan hospitales y sanitarios
La creciente actividad sísmica ha sido perceptible en otras zonas del territorio oriental, pero Santiago de Cuba es el más vulnerable a un terremoto por estar ubicada muy cerca a la falla Oriente que limita las fronteras de las placas tectónicas de Norte América y la del Caribe.
Los terremotos fuertes que se han registrado en Cuba han ocurrido a lo largo de esta frontera de placa tectónica, han dicho expertos.
Los reportes locales indican que existen 13 estaciones sismológicas transmitiendo en la isla. Otras tres están pendientes de montaje entre Moa y Baracoa.
Unos 15 puntos han sido improvisados para entre otros proveer servicios médicos y sanitarios a las familias.
Cuba reportó 5.053 sismos a lo largo del pasado año 2015. Del total, 17 fueron perceptibles y la mayor incidencia ocurrió al sur de la región oriental.