La situación se vuelva cada vez más difícil para los opositores en Nicaragua a medida que se acercan la elecciones presidenciales, programadas para el próximo mes de noviembre, según el reciente informe publicado por Human Rights Watch (HRW) en el que se denuncian las arbitrariedades cometidas por el régimen Ortega-Murillo contra candidatos a la presidencia, periodistas, críticos del sistema y otros opositores.
Según HRW, desde finales de mayo del presente año, suman 36 los detenidos en el país centroamericano a quienes, en respuesta a las acusaciones de “desaparición forzosa”, el gobierno sandinista permitió contacto con sus familiares por primera vez desde su detención el pasado 31 de agosto.
En la mayoría de los cargos que se han presentado contra los detenidos las sanciones oscilan entre 15 y 25 y las acusaciones que pesan sobre ellos van desde “lavado de dinero” hasta “conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional”, explica el informe de HRW.
Lee también SOS por el joven líder opositor que increpó a Daniel Ortega en 2018Al respecto, José Manuel Vivanco, director para las Américas de HRW, declaró que “La velocidad con la cual el gobierno de Ortega ha llevado a cabo esta ola de detenciones antes de las elecciones presidenciales de noviembre, sometiendo a sus críticos a condiciones horrorosas de detención y acusándolos de delitos sin ninguna base ni debido proceso, revela que Ortega no tiene la más mínima intención de perder los próximos comicios”.
“El gobierno de Ortega”, agregó Vivanco, “debe liberar inmediata e incondicionalmente a todos los presos políticos y la comunidad internacional debe redoblar la presión sobre el gobierno para aumentar el costo de sus prácticas abusivas”.
La orden de detención emitida contra el escritor Sergio Ramírez, quien fuera vicepresidente en el anterior gobierno de Daniel Ortega y quien debió acudir al exilio el pasado mes de junio por criticar fuertemente las acciones de quien fuera su compañero en el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), así como las órdenes de detención emitidas contra periodistas y académicos que también han recurrido al exilio es otro de los puntos señalador por HRW.
En el apartado dedicado a los “cargos falsos”, la organización defensora de los derechos humanos en el mundo señala que se pudieron examinar “las acusaciones que enumeran las pruebas contra 14 opositores del gobierno, y halló que, en ninguno de los casos, la fiscalía señaló actos punibles como sustento de la acusación”.
Lee también "Ortega va a ser un dictador más": Nicaragua retiene novela de Sergio Ramírez“Según las acusaciones”, asegura el reporte, “la mayoría de los 14 opositores habría solicitado o apoyado ‘sanciones económicas, comerciales y de operaciones financieras en contra del Estado de Nicaragua’, ‘incita(do) a la injerencia extranjera en los asuntos internos’ y/o promovido acciones para ‘desestabilizar el país con financiamiento extranjero’ con el fin de ‘desacreditar al gobierno de Nicaragua”.