El Tribunal Municipal de Boyeros, en La Habana, confirmó una sentencia de 4 años de cárcel para la Dama de Blanco Aymara Nieto Muñoz, bajo los supuestos delitos de atentado y daños, según informó este jueves a Radio Martí su hija, Amarilis Silveira Nieto.
Nieto Muñoz permanecía encarcelada sin juicio desde mayo de 2018 cuando intentaba participar junto a otras Damas de Blanco en sus salidas dominicales para pedir por la libertad de los presos políticos cubanos.
La hija de Nieto Muñoz dijo que la sanción fue desglosada así: “en el caso del delito de atentado, 1 año y 4 meses; por (el delito de) daños, de 2 a 8 meses”, y en sanción conjunta 4 años de prisión.
Amarilis Silveira denunció que a la Dama de Blanco Nieto Muñoz le impusieron además una multa por daños al uniforme de una de las militares que la arrestaron en mayo pasado.
“Tiene que pagar supuestamente la camisa que ella rompió, que son 7 pesos cubanos con cincuenta centavos (…) dice ella que no va a pagar, porque si no ella estuviera afirmando que lo hizo intencionalmente y no es así”, explicó la mujer.
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Entrevista Aimara Nieto Muñoz
En mayo próximo Nieto Muñoz cumple un año de encarcelamiento en la Prisión de Mujeres “El Guatao”, en el municipio La Lisa.
Es la segunda vez que Nieto Muñoz es llevada a la cárcel por motivos políticos: la primera vez permaneció desde julio de 2016 a julio de 2017 en la misma cárcel, después que la detuvieran en la calle distribuyendo octavillas y materiales audiovisuales junto a su esposo, Ismael Boris Reñí, y el activista Yosvany Martínez Lemus, todos integrantes de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU).
Muñoz debutó en prisión con una hipertensión arterial, denunció su hija, y no está recibiendo tratamiento médico.
Otras cuatro activistas del movimiento fundado por Laura Pollán en 2003 permanecen entre rejas, acusadas de delitos como impago de multas (impuestas por evadir los cercos de seguridad), atentado y desacato, entre otros, son ellas: Marta Sánchez, Nieves Matamoros, Yolanda Santana y Xiomara Cruz Miranda.
Desde el 20 de marzo de 2016, cuando el entonces presidente Barack Obama llegó a La Habana, las mujeres no han podido asistir a la misa dominical en la Iglesia Santa Rita de Casia, en el barrio de Miramar. Luego del servicio religioso, las mujeres marchaban por la 5ta Avenida, ocasión en que se reunían y además exigían al régimen castrista la liberación incondicional de los presos políticos cubanos.
(Con entrevista de Ivette Pacheco para Radio Martí, Radio Televisión Martí y redes sociales)