El presidente ruso Vladimir Putin aprobó este lunes una ley que ratifica una serie de protocolos para la modificación de los acuerdos de préstamos con Cuba, prevé la reestructuración de la deuda contraída por la isla y le ofrece condiciones ventajosas para su pago.
El gobierno ruso aprobó la medida en una sesión plenaria del Consejo de la Federación con el objetivo de "garantizar el cumplimiento de los intereses" de Rusia, y de "las obligaciones de deuda de Cuba", señala una nota publicada por la Sociedad Rusa de Amistad con Cuba.
Los protocolos aprobados por Putin se refieren a la concesión por parte de Rusia de préstamos de exportación al gobierno cubano entre 2009 y 2019 para financiar, fundamentalmente, el suministro de petróleo y productos derivados.
La nota cita declaraciones del Secretario de Estado y Viceministro de Finanzas ruso Alexéi Sazánov, que cifran la deuda contraída por Cuba, en virtud de los cuatro acuerdos que serán reestructurados, en unos 277,2 millones de dólares.
"Según sus palabras, como resultado de las negociaciones se acordaron cambios en las condiciones de pago de la deuda, como realizar los pagos en rublos, posponer los pagos programados de 2023-2027 al período 2028-2040, así como establecer un procedimiento para el cálculo de intereses sobre importes aplazados", detalla la nota.
Rusia espera, según manifestaron sus parlamentarios, que la ayuda otorgada a Cuba para financiar el suministro de petróleo y otros productos fortalezca las posiciones de política exterior de Rusia en América Latina, señaló la Sociedad Rusa de Amistad con Cuba.
En junio de 2022, el consejo de la Federación de Rusia aprobó una serie de enmiendas que modificaban los acuerdos para el crédito estatal otorgado a Cuba en 2002, y de tres créditos de exportación para la financiación de petróleo y derivados de 2017 y 2019. Por ley, estos protocolos requieren de ratificación, ya que prevén la reestructuración de la deuda de un estado extranjero ante Rusia.
La isla caribeña vive una profunda crisis energética, con el regreso de los prolongados apagones a lo largo de toda la isla, incluida la capital, y el alza de los precios del combustible en 500%, un panorama en el que la ayuda de Rusia marcaría una diferencia.
La alianza entre La Habana y Moscú se ha fortalecido en años recientes con visitas de alto nivel en ambas direcciones y la firma de varios acuerdos de cooperación económica y militar.
“Hay un diálogo muy intenso, entre Rusia y Cuba, en diferentes ámbitos”, constató en febrero pasado, durante una visita a la isla, el secretario del Consejo de Seguridad de la Federación de Rusia y mano derecha de Putin, el General de Ejército Nikolai Patrushev.
El gobernante cubano Miguel Díaz-Canel, por su parte, subrayó el "excelente estado del diálogo político-diplomático" entre ambos aliados, que "se continúa ampliando", aseguró.