La popularidad de la presidenta brasileña cayó en junio a un 39 por ciento, indicó la encuestadora IBOPE.
La popularidad de la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, ha seguido bajando y el respaldo para su reelección en octubre alcanza a un 39 por ciento de los votantes, según un nuevo sondeo publicado este jueves.
Su principal rival, el opositor Aécio Neves, cuenta con el respaldo de un 21 por ciento de los posibles votantes, mientras que Eduardo Campos alcanza un 10 por ciento, según un sondeo de la encuestadora IBOPE.
El índice de aprobación para el Gobierno de Rousseff cayó a un 31 por ciento desde un 36 por ciento en el sondeo anterior deI IBOPE, correspondiente a marzo.
La aprobación personal de la presidenta bajó a 44 por ciento desde un 51 por ciento en la encuesta pasada.
El sondeo de marzo no examinó las intenciones de los votantes.
Para la nueva encuesta, encomendada por la Confederación de la Industria Brasileña, se entrevistaron a 2.002 personas entre el 13 y el 15 de junio, y el sondeo tiene un margen de error de más o menos 2,0 puntos porcentuales.
Entretanto, varios miles de manifestantes marcharon el miércoles en Sao Paulo para demandar una rápida aprobación de un plan de vivienda para personas de bajos recursos en la ciudad, una señal de que la ola de descontento en Brasil puede prolongarse más allá de un Mundial relativamente calmo.
El movimiento de trabajadores sin hogar tomó las calles por primera vez desde que se inició la Copa del Mundo el 12 de junio, pero a diferencia de protestas anteriores, los participantes aseguraron que sus demandas no eran incompatibles con el hecho de que Brasil organizara el torneo de fútbol.
Tras meses de críticas sobre los enormes gastos de los estadios y de no terminar la infraestructura que beneficiaría a los brasileños después de que miles de hinchas regresen a sus países, los partidarios de la presidenta Dilma Rousseff esperaban que el arranque del Mundial más tranquilo de lo esperado frenaría su reciente caída en la popularidad.
Su principal rival, el opositor Aécio Neves, cuenta con el respaldo de un 21 por ciento de los posibles votantes, mientras que Eduardo Campos alcanza un 10 por ciento, según un sondeo de la encuestadora IBOPE.
El índice de aprobación para el Gobierno de Rousseff cayó a un 31 por ciento desde un 36 por ciento en el sondeo anterior deI IBOPE, correspondiente a marzo.
La aprobación personal de la presidenta bajó a 44 por ciento desde un 51 por ciento en la encuesta pasada.
El sondeo de marzo no examinó las intenciones de los votantes.
Para la nueva encuesta, encomendada por la Confederación de la Industria Brasileña, se entrevistaron a 2.002 personas entre el 13 y el 15 de junio, y el sondeo tiene un margen de error de más o menos 2,0 puntos porcentuales.
Entretanto, varios miles de manifestantes marcharon el miércoles en Sao Paulo para demandar una rápida aprobación de un plan de vivienda para personas de bajos recursos en la ciudad, una señal de que la ola de descontento en Brasil puede prolongarse más allá de un Mundial relativamente calmo.
El movimiento de trabajadores sin hogar tomó las calles por primera vez desde que se inició la Copa del Mundo el 12 de junio, pero a diferencia de protestas anteriores, los participantes aseguraron que sus demandas no eran incompatibles con el hecho de que Brasil organizara el torneo de fútbol.
Tras meses de críticas sobre los enormes gastos de los estadios y de no terminar la infraestructura que beneficiaría a los brasileños después de que miles de hinchas regresen a sus países, los partidarios de la presidenta Dilma Rousseff esperaban que el arranque del Mundial más tranquilo de lo esperado frenaría su reciente caída en la popularidad.