La Relatora Especial sobre la situación de las personas defensoras de los derechos humanos y otros expertos de la ONU expresó al régimen de Cuba su preocupación por la situación del líder del Movimiento San Isidro, Luis Manuel Otero Alcántara, quien lleva más de 1 año preso tras su detención el 11 de julio de 2021.
A través de un informe, la funcionaria aseguró que Otero Alcántara es perseguido por ser defensor de los derechos humanos, "específicamente, la libertad de expresión artística, y la libertad de opinión", y expresó que la condena de 5 años de prisión que enfrenta se debe solo a eso.
La organización condenó que el opositor estuvo 10 meses en prisión preventiva sin una fecha de juicio establecida, a pesar de que, bajo la ley, el máximo son 60 días, violando de esta manera el debido proceso.
La Relatora Especial destacó que el 23 de mayo de 2022 le fue enviado al régimen cubano una comunicación sobre el caso del activista, sin embargo, este no respondió en el plazo de 60 días antes de hacerla pública.
"El Gobierno no respondió durante este plazo. Si se recibe una respuesta, se la publicará en la base de datos de los Procedimiento Especiales de la ONU", subraya la comunicación.
En el informe se describen las condiciones de encarcelamiento en las que se encuentra el opositor en la prisión de máxima severidad de Guanajay, donde es víctima de castigos que van desde el aislamiento hasta la prohibición de llamadas a familiares y amigos.
Desde que fue encarcelado, el activista ha realizado tres huelga de hambre y sed exigiendo su liberación.
La curadora de arte Claudia Genlui denunció recientemente que la Seguridad del Estado ha montado contra el artista un operativo llamado “acoso y derribo”, colocando su vida en peligro. Según dijo, Otero Alcántara se encuentra encerrado en una celda con presos que han cometido "delitos comunes" con el fin de provocar al joven opositor para “complicarle la vida”.
En varias oportunidades, la Seguridad del Estado le ha propuesto al artista intercambiar su libertad por el exilio forzado, pero Otero Alcántara se ha negado a tal oferta porque, asegura, para él “el exilio no es una opción”.