La Seguridad del Estado detuvo este jueves por algunas horas al reconocido escritor y expreso político cubano Angel Santiesteban-Prats, a raíz de las protestas en la Gran Logia de Cuba, denunció su pareja, la periodista cubana Camila Acosta.
"Lo habían llevado para la estación policial de La Lisa, a unos 18 kilómetros de nuestra vivienda. Ahí lo interrogaron y luego lo llevaron hasta el Supremo Consejo, en San Francisco y Espada, municipio de Centro Habana, donde el Soberano Gran Comendador hablará ahora a los masones sobre todo lo que está ocurriendo. Ángel dará detalles más adelante. Brevemente, mediante una llamada telefónica, me explicó que la Seguridad del Estado quiere evitar que la prensa reporte todo lo que está sucediendo, que no quieren escándalo, y que la vigilancia que tenemos desde esta mañana era para evitar también que yo saliera", indicó Acosta.
La periodista había dicho a Martí Noticias "nosotros teníamos vigilancia desde esta mañana y él salió para ir, tenía que ir primero a otro lugar y después iba a ir a al Supremo, ubicado en Infanta y San Lázaro".
“Salió, movilizó a un vecino porque salió sin teléfono y nada, previendo que ocurriera eso mismo y un vecino fue el que me avisó que se lo habían llevado", agregó la periodista en declaraciones a nuestra redacción.
Your browser doesn’t support HTML5
Poco antes había denunciado la detención en un post en sus redes sociales. "Esto es una afrenta directa a la Masonería tras la protesta en la Gran Logia. Pretenden darle a sus reclamos una connotación política. Tanto Mario Urquía como el canal de desinformación de la Seguridad del Estado (El Guerrero Cubano) han tratado de manipular y desvirtuar todo, como si la protesta de los masones tuviera un trasfondo político y formara parte de maniobras de la CIA. Nadie les cree, pero buscan la justificación para aplastar la rebelión. Y somos, Ángel y yo, sus blancos para justificar el golpe que están implementando contra la Masonería".
Esta semana, varios miembros de esa fraternidad protestaron en la sede de la Gran Logia de Cuba, en La Habana, por un escándalo que involucra al Gran Maestro Mario Alberto Urquía Carreño, presuntamente implicado en el robo de 19.000 dólares destinados al Asilo Nacional Masónico.
Lee también Tras protesta de masones, Gobierno cubano permite elección de Gran Maestro de la Logia Lee también Masones cubanos exigen renuncia del Gran Maestro y denuncian intromisión del gobierno en la Logia"Si el 23 de julio estábamos en la Gran Logia, era para apoyar, no para ser protagonistas de nada. Los protagonistas fueron los más de 200 masones asistentes y los miles que no pudieron ir o nos respaldaban con llamadas y mensajes desde diferentes provincias e incluso fuera del país. La masonería cubana está bajo ataque, con la complicidad de Mario Urquía, el Gran Maestro impuesto por los órganos represivos. Las intromisiones han ocurrido en más de 60 años, pero con este golpe pretenden aplastar, de una vez, el libre pensamiento que promueven los masones. Este no es un golpe a la Masonería solamente, sino a la patria, es la implantación de una dictadura dentro de una Institución que ha sabido sobrevivir en dictadura y seguir promoviendo la libertad, la igualdad y la fraternidad. Si la Seguridad del Estado logra subyugar a los masones, uno de los vestigios más importantes de libertad que quedan en la Isla, ahí me convenceré de que este país no tiene salvación alguna", escribió Acosta.
Santiesteban-Prats, nacido en La Habana en 1966, ha recibido numerosos premios literarios en Cuba y el mundo. De su obra destacan Dichosos los que lloran (2006), El verano en que Dios dormía (2013) y Los hijos que nadie quiso.
El escritor fue condenado a 5 años de cárcel en 2013, bajo acusaciones "violación de domicilio y lesiones", imputación hecha a partir de la aparición de notas críticas contra el régimen castrista en su blog Los hijos que nadie quiso.
(La periodista Yolanda Huerga contribuyó a este reporte)