A reducir gastos y racionalizar los recursos instó el gobernante Raúl Castro a los cubanos el martes, en un discurso en el que admitió "afectaciones" en la hasta ahora ventajosa relación con su aliado venezolano, en momentos en los que las moderadas reformas económicas implementadas no acaban de rendir fruto en la vida cotidiana de los cubanos.
Castro se refirió, ante la Asamblea Nacional del Poder Popular, a la previsión a la baja del PIB de la isla al 2% en el 2016, una contracción con respecto al 4% reportado este año, debido, en parte, a la caída de los precios internacionales de productos exportables como el níquel.
En el discurso transmitido por la televisión en la noche del martes, Castro retomó el argumento ideológico, en el intento por imprimir ánimo a los cubanos.
"Ante este escenario no cabe, como siempre nos ha enseñado Fidel, el más mínimo derrotismo, todo lo contrario. La historia de nuestra Revolución está llena de páginas gloriosas frente a las dificultades, riesgos y amenazas", dijo Castro en la última sesión de la Asamblea Nacional este año.
"Al propio tiempo, debemos reducir cualquier gasto que no sea imprescindible y aprovechar los recursos de que disponemos con más racionalidad y con vocación de desarrollar el país", agregó.
Castro fue claro incluso al aludir a la situación de su aliado el presidente venezolano, Nicolás Maduro, cuyo Gobierno mantuvo la alianza iniciada por el fallecido Hugo Chávez, que incluye la entrega diaria de 100.000 barriles diarios de petróleo a precios preferenciales, mientras La Habana mantiene a unos 30.000 médicos cubanos en el país suramericano.
"Pese a que la baja de los precios del petróleo nos beneficia al reducirse la factura de importación de alimentos, materias primas y productos manufacturados, no es menos cierto que se han generado desde este propio año 2015 afectaciones en las relaciones de cooperación mutuamente ventajosas existentes con varios países, en particular con la República Bolivariana de Venezuela", señaló.
Su comentario llega en momentos en los que la oposición venezolana, con amplia mayoría en la Asamblea Nacional a partir de enero, ha dicho que tomará medidas para poner fin al mandato de Maduro en los próximos seis meses.
Medios locales que reseñaron la reunión aludieron a algunas de las preocupaciones que tiene la mayoría de los cubanos, entre ellas el alto precio de los alimentos, muchos de ellos prohibitivos para la mayoría.
Diputados de la Asamblea que se refirieron al tema pidieron "topar los precios" de productos agrícolas, una propuesta que al parecer fue respaldada por Raúl Castro.
"No podemos permitir que un país como este, que ha resistido más de medio siglo a los embates de la potencia mayor del planeta, no pueda enfrentarse a un grupo de pillos que cada día se están enriqueciendo más", dijo Castro, según una nota publicada por la página digital de la estatal emisora Radio Reloj.