En un discurso pronunciado ante la Cumbre de Desarrollo Sostenible, el gobernante cubano Raúl Castro dedicó las palabras finales de su intervención a mencionar el restablecimiento de relaciones diplomáticas con Estados Unidos y dijo que "constituyen un importante avance”.
Como viene siendo habitual, el mandatario utilizó también la oportunidad para recordar que "persiste el bloqueo económico, comercial y financiero contra Cuba por más de medio siglo", y que este es "el principal obstáculo para el desarrollo económico" de su país.
Castro, en cuyo discurso denunció los "niveles inaceptables de pobreza" que sufren muchas partes del mundo, el aumento de la brecha entre Norte y Sur, y el incremento de la "polarización de la riqueza", enfatizó nuevamente el argumento de que el embargo afecta a otras naciones y perjudica a las empresas y ciudadanos estadounidenses.
Castro también aseguró que "la inestabilidad en numerosas regiones tiene su raíz en la situación de subdesarrollo en que viven dos tercios de la población mundial", y en medio de la crisis los "acaudalados y las compañías trasnacionales se hacen cada vez más ricos", mientras aumenta el número de pobres.
El gobernante cubano abogó por "construir otra arquitectura financiera internacional, eliminar el monopolio tecnológico y del conocimiento y cambiar el orden económico internacional vigente”. Igualmente, sostuvo que los países industrializados deberían "aceptar su deuda histórica y ejercer el principio de responsabilidades comunes pero diferenciadas".
Castro, para quien es la primera visita a la ONU y la segunda a Estados Unidos, volverá a intervenir ante la Asamblea General el próximo lunes, el mismo día que lo hará Barack Obama.