El rapero contestario Omar Mena (El Analista) denunció este viernes desde Santa Clara el operativo de vigilancia al que la Seguridad del Estado los tienen sometidos, tanto a él como a su familia, compuesta por su esposa y un bebé de sólo cuatro meses de nacido, después de que el artista, a comienzos de semana, formara parte de una convocatoria a una manifestación pacífica en un conocido parque de esa ciudad.
“Ellos están allá afuera hoy, desde temprano, como están casi todos los días”, dijo Mena este viernes a Radio Martí y, a continuación, relata la tensa situación vivida el pasado domingo, cuando aceptó, acompañado por su esposa y su pequeño hijo, encontrarse con sus amigos para tomar un café en El Mejunje, una cafetería ubicada en el parque central de la ciudad.
Lee también Activistas, artistas y periodistas cubanos bajo cerco policial“Cuando salí de la casa me cayeron tres motores atrás. Cuando llegamos al Mejunje todo estaba tranquilo, ellos parquearon los motores y, cuando pasamos por el balcón, armaron una cantaleta revolucionaria de esas”.
Según informa Omar Mena, la Seguridad había movilizado gente de la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU) “y de todos lados”, dice y agrega “están perdidos en lo que están haciendo. No saben lo que están haciendo”.
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De acuerdo con lo relatado por Mena, decidieron marcharse al parque debido al ruido y, al llegar, los reclutados por la SE comenzaron a desplegar banderas de “revolucionarias”, a gritar consignas, y a ocupar todos los bancos en el parque.
“Es una situación”, afirma el músico “que te hace sentir que están violentando todo tu espacio, toda tu vida además. […] Ellos hacen toda esa parafernalia y todo ese despliegue de abuso de poder”.
El rapero también cuenta que en la emisión nocturna del Noticiero Nacional de Televisión “sacaron un post de los que yo he publicado” y de inmediato, dice, comenzaron a hablar “de los mercenarios y de los asalariados del imperio”.
Ante esta acusación, Omar Mena responde: “Yo no soy asalariado. Yo, al final de la historia, tengo aquí una casa que, sin pena, se me está cayendo arriba, un solo par de zapatos […] Es muy triste lo que está sucediendo en Cuba ahora mismo”, concluye.
(Con reporte de Ivette Pacheco para Radio Martí)