En La Haya, los familiares de las víctimas del desastre del Boeing malayo sobre la región del Donbass instalaron este domingo 298 sillas blancas frente a la Embajada de la Federación Rusa en los Países Bajos, recordación a las víctimas de la tragedia ocurrida hace ya 6 años.
La protesta de los familiares fue silenciosa, con fotos y flores sobre las sillas blancas vacías, y fueron colocados en filas como los asientos de un avión.
El avión fue derribado con un misil Buk disparado desde el territorio de los rebeldes separatistas pro-Rusia derribó el vuelo de Ámsterdam a Kuala Lumpur el 17 de julio de 2014, matando a todos los que iban a bordo.
Las familias permanecieron en silencio durante dos minutos después de colocar las sillas y los carteles, incluyendo uno que decía: "Impunidad = inaceptable! Alguien sabe lo que pasó... Justicia para el MH17".
El propósito de la protesta silenciosa, que tuvo lugar el día antes del comienzo del juicio sobre el desastre, fue pedir a las autoridades rusas que aceptaran su responsabilidad y contra la falta de cooperación de Moscú en la investigación del derribo del avión de pasajeros.
Rusia niega su implicación en el desastre y culpa a la investigación por su parcialidad. Las autoridades rusas, sin embargo, no han presentado ninguna versión oficial de quién o cómo derribó el Boeing.