El presidente ruso Vladimir Putin afirmó el sábado ante la nación que tomará “acciones decisivas” para aplastar lo que describe como "una rebelión armada" que "ha traicionado al país".
Putin, en sus primeras declaraciones desde que comenzó la rebelión el día anterior, habló por cinco minutos y aseveró que los responsables de este uso de la fuerza contra Rusia serán castigados.
Los rebeldes, dijo, “están empujando a Rusia a la anarquía y el fratricidio”. “Han traicionado a Rusia”, subrayó el presidente de la nación.
Putin se refirió a los rebeldes sin mencionar el nombre del líder del grupo, su exaliado, Yevgeny Prigozhin. No obstante, comentó que esta traición fue provocada por “ambiciones exorbitantes e intereses personales”.
A pesar de las advertencias del presidente ruso, Prigozhin publicó un audio diciendo que no se rendirá.
Lee también Tensión en Rusia entre el grupo Wagner y Vladimir Putin, en medio de acusaciones de una rebelión armadaVarios políticos, diputados y líderes regionales rusos dieron su apoyo a Putin tras su mensaje del sábado.
Los primeros en darle un espaldarazo fueron los líderes de las provincias ucranias anexionadas ilegalmente de Crimea, Donetsk y Lugansk, Serguéi Axiónov y Denís Pusilin y Leonid Pasechnik, respectivamente. “Crimea está con el presidente”, publicó Axiónov en su canal de Telegram mientras Pushilin escribió un mensaje casi con el mismo contenido, informó el diario español El País.
El presidente de la Cámara Baja rusa, Viacheslav Volodin, dijo que la historia de Rusia ha demostrado que “las desgracias y los problemas del país siempre tuvieron lugar solo debido a las traiciones, las divisiones internas y las traiciones de las élites”, reportó el diario madrileño.
“Ahora lo más importante para la victoria ante los enemigos externos e internos que anhelan destrozar a nuestro país, para salvar nuestro Estado, es necesario unirnos en torno a nuestro presidente, el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas del país”, declaró el vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia y expresidente, Serguéi Medvédev, informó la agencia de prensa EFE.
Entretanto, el gobierno de Estados Unidos ha indicado que está observando la situación, y que el secretario de Estado Antony Blinken ha estado en contacto con socios europeos y del G7 para evaluar los acontecimientos.