Continúa el acoso y hostigamiento de las autoridades cubanas contra del pastor apostólico santiaguero Alaín Toledano.
Este miércoles fueron detenidos por la policía y enviados para la Unidad del reparto Abel Santamaría los dueños de la propiedad donde se realizan los cultos de la iglesia Emanuel, con la intención de presionarlos para que desalojaran al templo de su propiedad, denuncia el pastor Toledano.
“Tuve que ir este miércoles a la estación de la policía temprano en la mañana, porque como tengo una medida cautelar, tenía que ir a firmar y además, intentar saber sobre mi situación legal, mientras yo estaba allí, paralelamente se presentaron dos inspectores al lugar donde nosotros damos la celebración, se trata de la casa de Rudy y su esposa Heidy, amenazaron al dueño de la casa, de que el culto allí se tenía que acabar", explicó el religioso.
Lee también El régimen utiliza el COVID-19 para atacar a comunidades religiosas, denuncian pastores (VIDEO)"La carpa que nosotros ponemos para que los miembros de la congregación no estén expuestos al sol, no se podía poner más y había que quitar los tubos que la sostenían, entonces, cuando él dijo que no iba a sacar a la iglesia de su propiedad y que tampoco los tubos los iba a quitar, vinieron con la policía y se lo llevaron detenido a él y la esposa, los hijos de ambos, los tres muchachos se quedaron llorando al ver que la policía se llevaba a su papá y a su mamá”, contó Toledano.
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El pastor se presentó entonces en la estación de la policía del Micro-3 en el reparto Abel Santamaría, y sostuvo un intenso careo con los oficiales de la unidad, algunos de ellos miembros de la Seguridad del Estado.
El matrimonio dueño de la casa fue liberado horas más tarde bajo la amenaza de ser multados y acusados de un delito, comentó el pastor.
Lee también Pastor cubano irá a juicio; líderes apostólicos denuncian incremento de represión“Tuvimos allí un enfrentamiento bastante fuerte, realmente no había razón para ponerles ninguna multa, no se la pusieron, aunque los amenazaron que se la podían poner y también podrían ser acusados de desacato, gracias a Dios, después de tanta discusión, Rudy su esposa ya están en casa junto a sus hijos ”, señaló Alaín.
El líder del Ministerio Apostólico Internacional Sendas de Justicia considera que este episodio es parte de una hoja de ruta que tiene la policía política en su contra.
“La idea es tratar de desaparecer a la Iglesia, y la idea es acosar a mi persona y provocarme para que la medida cautelar que me tienen puesta se convierta en algo más grave y ellos puedan entonces tener un caso bien concertado, hacerme otro tipo de acusación y poderme encerrar”, denunció el líder religioso.