En julio, mes en que se cumplió el tercer aniversario de las protestas más grandes de los últimos 60 años en la Isla, las fuerzas represivas del régimen ejecutaron al menos 418 hechos violatorios de las libertades civiles contra la población cubana, revela un informe publicado este martes por el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH).
“En lo que va de año, julio ha sido el mes más represivo. Evidentemente, el régimen desplegó una serie de acciones represivas para que la gente no celebrara, o no recordara de alguna manera el tercer aniversario de las protestas del 2021 y, por tanto, llevó a cabo detenciones arbitrarias, retenciones de activistas, opositores y familiares de presos políticos en sus casas, y también desplegó una serie de amenazas de todo tipo”, comentó a Martí Noticias Yaxis Cires, Director de Estrategias de la organización, asentada en Madrid.
El informe mensual revela que la Seguridad del Estado, la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) y otros cuerpos militares y paramilitares realizaron 70 detenciones arbitrarias y 145 retenciones ilegales en viviendas.
También compiló 72 acciones de abusos de los mandos penitenciarios contra los prisioneros políticos y 9 contra comunes.
La entidad agregó en su dossier que además de las ya mencionadas, las principales acciones represivas registradas fueron amenazas, citaciones policiales, hostigamientos, multas, procesos judiciales espurios y transgresiones de los derechos religiosos.
Las provincias en las que el OCDH documentó mayor represión gubernamental fueron La Habana, Matanzas y Mayabeque.
La organización apunta que recibió 40 denuncias relacionadas con violaciones de los derechos sociales, la mayoría de ellas, relacionadas con la escasez de medicamentos y las dificultades con la vivienda.
“Nosotros estamos denunciando esta situación, como siempre lo hacemos, pero también hacemos un llamado a los funcionarios públicos para que no contribuyan con la represión, y creemos que el régimen lo que tiene es que enfocarse en solucionar los graves problemas que tiene la gente del país, que tienen que ver, principalmente, con el crecimiento de la pobreza, la escasez de alimentos, de medicinas, los problemas con el transporte, con el agua, con la vivienda, etcétera, y no dedicarse a reprimir”, concluyó Cires.