Un tribunal ruso aceptó una solicitud de los fiscales para ampliar la detención de la periodista de Radio Free Europe/Radio Liberty (RFE/RL) Alsu Kurmasheva, acusada de no registrarse como agente extranjero.
La periodista del Servicio Tártaro-Bashkir de RFE/RL, con sede en la República Checa, tiene pasaporte estadounidense y ruso, entró en Rusia el 20 de mayo. Mientras esperaba su vuelo de regreso, el 2 de junio, fue detenida y sus pasaportes confiscados. Posteriormente fue multada por no declarar su pasaporte estadounidense.
El 18 de octubre, las autoridades anunciaron que Kurmasheva había sido acusada de no registrarse como "agente extranjero", un cargo que conlleva una pena máxima de cinco años de prisión.
El servicio de prensa del tribunal del distrito Sovetsky de Kazán informó el sábado que la detención de Kurmasheva se extendió 72 horas más, es decir, hasta las 13:00 horas. hora de Moscú del 23 de octubre.
El Departamento de Estado norteamericano dijo el jueves que el gobierno de Rusia aún no había notificado oficialmente sobre este arresto.
"Este es un caso que hemos estado siguiendo desde mayo, cuando el gobierno ruso confiscó sus pasaportes y le impidió salir del país. Los detalles de nuestro trabajo no se hicieron públicos hasta ahora porque pensamos que no era útil para la causa lograr que ella saliera, pero este parece ser otro caso de acoso del gobierno ruso a ciudadanos estadounidenses”, dijo el vocero del Departamento de Estado, Matthew Miller, en una conferencia de prensa.
Kurmasheva es una periodista consumada que ha cubierto durante mucho tiempo a las comunidades de minorías étnicas en Tartaristán y Bashkortostán en la región rusa de Volga-Ural. Ha informado sobre las iniciativas para proteger y preservar la lengua y la cultura tártaras de las presiones de las autoridades rusas, precisó RFE/RL.
“El periodismo no es un delito. Alsu Kurmasheva es una periodista distinguida y un miembro querido de su comunidad. Su detención es categóricamente injusta y debería ser liberada de inmediato”, dijo Amanda Bennett, directora ejecutiva de la Agencia de Medios Globales de los Estados Unidos (USAGM), que regula, entre otros servicios, el de la Oficina de Transmisiones a Cuba.