Periodista independiente denuncia vigilancia a pocos días de la sesión constitutiva de la Asamblea Nacional

Camila Acosta, periodista independiente de Cuba. (Foto perfil de Twitter).

La Seguridad del Estado intensificó la vigilancia a la periodista Camila Acosta poco antes de la fecha señalada para la sesión constitutiva de la Asamblea Nacional del Poder Popular en la que se elegirán los cargos claves en el país, como el de presidente, vicepresidente y miembros del Consejo de Estado.

“Todos los que vivimos en Cuba y que, de alguna manera, decimos lo que pensamos y denunciamos a la dictadura, vivimos en un estado de sitio constante pero la de hoy, justamente se trata de que ya están montando un operativo, como suelen hacer en fechas señaladas porque, en dos días, la Asamblea Nacional va a, supuestamente, renovar varios cargos de gobierno y coincidirá con la visita del Ministro de Exteriores de Rusia”, explicó el lunes a Radio Televisión Martí, la corresponsal del medio digital Cubanet y del diario español ABC, Camila Acosta.

“En momentos como estos, ellos [los agentes de la policía política] tratan de mantener a los periodistas, a los activistas y a todas las personas que le somos incómodas en una vigilancia, un control por si fuera a suceder algo, una protesta. En mi caso, el simple hecho de pretender reportar algunos de estos sucesos”, dijo la periodista residente en La Habana.

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El maniqueísmo en la política interna cubana y su falta de transparencia acumula las críticas y preocupación de gran parte de la sociedad civil. De igual forma, la represión contra el periodismo independiente ha sido siempre una prioridad para el régimen, pero tomó fuerza después de las protestas del 11 de julio del 2021 y del verano del 2022.

Acosta fue puesta en prisión domiciliar acusada de “delitos contra la Seguridad del Estado” por reportar sobre las manifestaciones del 11 de julio, pero casi un año después, las autoridades cerraron el expediente judicial con la imposición de una multa.


Pero la vigilancia contra la comunicadora se convirtió en un patrón.

“Es algo intermitente. Un vecino me dijo que vienen [los agentes policiales] a veces en la mañana o en la tarde. Se quedan dos o tres horas. El de la Seguridad del Estado monitorea mi vivienda y la patrulla espera en la esquina. Se van, al rato vuelven y así”, relató Acosta y agregó:

“Supongo que, además, tenga algún vecino o vecinos en esta función de vigilancia constante hacia mi persona”.

Activistas denunciaron también acciones represivas contra los observadores electorales independientes durante el proceso de votaciones para los 470 candidatos, sin rivales, que ocuparon 470 escaños del Parlamento cubano.