MUD afirma que paro nacional contra Maduro fue de un 50%

  • Agencias

Un local comercial abierto y otro cerrado este viernes, 28 de octubre de 2016, en Caracas (Venezuela).

Los venezolanos acataron hoy a medias el paro de 12 horas convocado por la Mesa de la Unidad Democrática, que busca presionar para que se convoque a un referendo revocatorio del mandato del presidente Nicolás Maduro.

El diputado opositor venezolano, Juan Andrés Mejías, vocero de la Mesa de Unidad Democrática (MUD) dijo que las actividades cotidianas se vieron afectadas este viernes en al menos 50% a pesar de las prácticas intimidatorias que se hicieron desde el gobierno.

Fueron los ciudadanos que prefirieron quedarse en su casa ante la frustración de un Gobierno que no quiere cambio. Nos informan desde el Metro de Caracas que la movilización en ese medio de transporte fue muy inferior a la que se ve un día domingo. Si el presidente quiere creer que aquí se vivió un día normal, que se quede en su mundo de fantasía”, afirmó Mejías al hacer un balance del paro nacional de 12 horas decretado por la MUD.

Mejías que la agenda de protestas seguirá y ratificó el llamado que hicieran todos los dirigentes de la coalición opositora el pasado 26 de octubre en la “Toma de Venezuela”. Llamó a que todo el mundo que quiere un cambio pacífico y constitucional se movilice el próximo jueves 3 de noviembre.

“No es un golpe de Estado, no es un llamado a la rebelión, es un llamado a alzarse firmes, no vamos a esperar que el TSJ con sentencias inconstitucionales intente ser el último juez que decida todo. Somos millones y ese cambio debe ocurrir en paz”, afirmó. Para el diputado, el Gobierno Nacional es quien debe responsabilizarse por la seguridad de la marcha que tiene como destino el Palacio de Miraflores.

La agencia Reuters señala que "a pesar de que las calles de Venezuela lucían con menos movimiento de lo habitual, el paro nacional convocado por la oposición concitaba sólo una tímida acogida el viernes, tras las amenazas del Gobierno de Nicolás Maduro de tomar el control de los negocios que no abrieran al público".

Un local cerrado y otro abierto en Caracas, Venezuela.

Según Reuters, "las advertencias parecían haber calado en las grandes industrias, cuyos gremios dejaron en manos de sus trabajadores la decisión de acudir a trabajar. En provincias, militares multaron a varios negocios que no abrieron, advirtiéndoles con carteles pegados en sus rejas".

Otra agencia, AFP, señala que "calles y avenidas de Caracas y otras ciudades del país lucían con menos movimiento que lo usual, pero el transporte y algunos comercios y escuelas están funcionando, universidades importantes cerraron pero los bancos están abiertos".

Agrega que la huelga general "era acogida parcialmente este viernes, lo que fue calificado por el Gobierno como un fracaso (…) En Caracas, Maracaibo –segunda ciudad del país-, San Cristóbal y otras capitales de estados del país se registra también una huelga de alcance parcial".

Entretanto, la agencia AP, dijo que "la necesidad de comerciantes y empresarios de abrir sus negocios y la urgencia por conseguir alimentos, en un país sumido en una profunda crisis económica, influyeron en el poco éxito del paro convocado el viernes por los adversarios de Nicolás Maduro".

La opositora venezolana María Corina Machado escribió en Facebook:

"Venezuela en desobediencia cívica. En todo el país el silencio de hoy ensordece".

Mostró varias fotos en las que se observa escaso tránsito en las autopistas y varios negocios cerrados, con pocos venezolanos caminando por las calles.

Agradeció al expresidente de Chile, Sebastián Piñera (2010-2014), quien pidió en su cuenta de Twitter a los Gobiernos de la región "a alzar fuerte la voz" contra la "dictadura" de Venezuela "en defensa de la libertad y democracia".

Se espera que este domingo, 30 de octubre, representantes del Gobierno y la oposición se reúnan en Isla Margarita, con la mediación de la Iglesia católica, para iniciar un diálogo e intentar bajar las tensiones.