Ciudad del Vaticano- Los miembros de la Dirección de la Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV), formada por seis obispos, se reunieron este jueves con el papa Francisco tras pedirle audiencia para informarle sobre la situación del país.
La audiencia comenzó a las 10.00 hora local (08.00 GMT) en el palacio pontificio, donde se celebran las reuniones oficiales.
Participaron el presidente de la CEV, el arzobispo de Cumaná Diego Rafael Padrón Sánchez; el vicepresidente y arzobispo de Barinas Luis Azuaje Ayala; los obispos de San Cristóbal, Mario del Valle Moronta Rodríguez, y de San Felipe, Víctor Hugo Basabe; el cardenal arzobispo de Caracas, Jorge Liberato Urosa Savino, y el cardenal arzobispo de Mérida, Baltasar Porras Cardoso. De la reunión con el papa Francisco y la posterior con el secretario de Estado, Pietro Parolín, no ha transcendido nada y únicamente se supo que los obispos entregaron al papa varios informes.
De acuerdo con los pocos segundos difundidos por la Televisión Vaticana, se pudo observar que los obispos entregaron al papa un informe con los fallecidos durante las protestas.
Según el ministerio Público venezolano, se han registrado 67 muertos en la oleada de violencia que sacude a la nación desde hace 69 días.
También en uno de los documentos se mostraban las cifras de la crisis humanitaria, según confirmó la Conferencia Episcopal Venezolana en Twitter.
Los seis obispos venezolanos pasaron varias horas en el Vaticano con otras reuniones previstas, pero no se difundió su agenda.
El encuentro con el pontífice había sido solicitado por la propia CEV, según explicó en un comunicado el pasado 5 de junio el portavoz vaticano, Greg Burke.
Los obispos habían expresado la necesidad de un encuentro con el pontífice tras agravarse la situación en Venezuela, con una oleada de protestas en la que, además de los fallecidos, más de un millar de personas han resultado heridas.
La iglesia venezolana ha criticado duramente la decisión del presidente, Nicolás Maduro, de convocar una Asamblea Nacional Constituyente para modificar la Constitución y ha instado en diferentes ocasiones a una solución electoral para el país.
El Vaticano participó en la fracasada mesa de negociación y el papa ha instado en diferentes ocasiones a resolver la situación que vive Venezuela.
Esta reunión tiene también el objetivo de demostrar la unión de la Iglesia venezolana con el pontífice, después de que se hablase de algunas críticas al papa por su insistencia en la mediación con Maduro.
En un comunicado, la CEV explicó que con el papa hablarían, como dijeron en su último comunicado del pasado 18 de mayo, del llamamiento a cumplir la Constitución, la petición de elecciones como una solución a la crisis, la apertura de un canal humanitario, la libertad de presos políticos y el respeto a la Asamblea Nacional.
El arzobispo de Caracas dijo en una entrevista con Radio Vaticano, en la víspera de la reunión, su deseo de "manifestar nuestra unión, nuestra comunión con el papa, nuestra gratitud y el apoyo de la Iglesia de Venezuela al trabajo del papa como un promotor de paz, no solamente en otras partes del mundo sino también en Venezuela".
Afirmó que "se trata de un encuentro para buscar la voz del pastor y para ayudar al pueblo venezolano para resolver la gravísima situación que está viviendo en estos momentos".
Según Urosa "la represión del Gobierno ha sido cada vez más cruel" y reiteró la posición de la Iglesia venezolana de rechazo a la Asamblea constituyente porque es "espuria, parcializada, no respeta el voto universal, libre y directo de los venezolanos, sino que va a hacerse de forma sectorial y con electores escogidos de forma irregular".
(Con información de EFE, y del Twitter oficial de la CEV)